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Poblaciones Juveniles Regionales

Ana Lucia Bedicks, Menchit Wong & Maggie Gathuku

Salmos 78:4-7 nos da un imperioso propósito para enfocar nuestra atención en la juventud como parte del cumplimiento de la gran comisión; incluso hace hincapié y dice: «(…) hablaremos a la generación venidera (…), para que los conocieran las generaciones venideras y los hijos que habrían de nacer, que a su vez los enseñarían a sus hijos». Esta necesidad de priorizar el enfoque en la próxima generación fue confirmada por el resultado de los conversatorios de Lausana que tuvieron lugar en 2020 y 2021, donde los líderes evangélicos de todas las regiones del mundo identificaron la necesidad de alcanzar, discipular y escuchar a los jóvenes como uno de los dos principales objetivos de la gran comisión.

Según las Naciones Unidas, actualmente hay más de 1800 millones de jóvenes en el mundo, que representan el 16 % de la población mundial, el 90 % de los cuales vive en países en desarrollo. El número de adolescentes y jóvenes es hoy el más alto de la historia, aunque se espera que disminuya considerablemente del 17,6 % en 2010 al 13,5 % en 2050 si la tasa de fecundidad mundial sigue disminuyendo. 

Como con cualquier misionero transcultural, es crucial que toda persona interesada en la misión entre los jóvenes sea un estudioso de la cultura juvenil y sus influencias en los jóvenes. Esto es esencial para comprender su cosmovisión del mundo y así poder comunicarles el evangelio y acogerlos en la familia de la fe. Esto va más allá de la mera cuestión sociológica; se trata de comprender el contexto cultural para poder llegar a ellos con el mensaje del evangelio de manera más efectiva.

Por lo tanto, este informe tiene como objetivo reflexionar a la luz de la gran comisión sobre las oportunidades y los desafíos demográficos de las poblaciones juveniles regionales, que serán divididas en dos: regiones con población juvenil en declive y regiones con población juvenil en aumeto —con especial atención en África, el continente juvenil clave—.  

¿Quiénes son los jóvenes y dónde están?

Unicef, en el marco de la protección de los derechos y el bienestar de la infancia, define a los niños como personas menores de 18 años. En cuanto al término «juventud», su definición operativa y sus matices varían de un país a otro, dependiendo de factores socioculturales, institucionales, económicos y políticos que son arbitrarios. La Organización de las Naciones Unidas ha adoptado la franja etárea de 15 a 24 años para describir a las poblaciones juveniles, y será esta franja a la que nos referiremos. 

Regiones con población juvenil en declive

América Latina y el Caribe

En 2021, alrededor del 16,3 % de la población de esta región era de entre 15 y 24 años,¹ lo que representa un descenso con respecto al 18,1 % registrado en 2011. El informe Cultura juvenil global: América Latina realizado por One Hope² encuestó a 1673 jóvenes de entre 13 y 19 años en Argentina, Colombia, México y España,³ y reveló que solo el 16 % de los adolescentes de los cuatro países se identifican como evangélicos; el 36 %, como católicos; el 42 % afirman no tener religión o se identifican como ateos o agnósticos, y un magro 3 % se consideran cristianos comprometidos. 

Brasil

En Brasil se observó la misma tendencia, con una disminución de la población joven que fue del 17,5 % en 2011 al 15,5 % en 2021.⁴ El Global youth culture: Brazil⁵ (informe⁶ «Cultura juvenil global: Brasil») de One Hope encuestó a 420 jóvenes, y reveló que el 31 % se identifica como evangélico; el 35 %, como católico; el 6 %, como de otras religiones; el 28 % dice no tiene religión o se identifica como ateo o agnóstico, y solo el 9 % de los jóvenes se consideran cristianos comprometidos.

América del Norte

En Norteamérica, la población de jóvenes descendió del 14 % en 2011 al 12,9 % en 2021.⁷ El informe Global youth culture: Estados Unidos⁸ (Cultura juvenil global: Estados Unidos) muestra que, aunque casi el 51 % de los adolescentes se identificaron como cristianos, solo el 8 % de los jóvenes se identificaron como cristianos comprometidos. En 2022, el Grupo Barna publicó los resultados de su investigación en un informe titulado The open generation (La generación abierta). En esta encuesta mundial, que incluyó a más de 24 000 adolescentes de 26 países diferentes, se les preguntó cómo veían a Jesús, la Biblia y la justicia. El 56 % de los más de 2000 encuestados norteamericanos se identificaron como cristianos. Sin embargo, solo el 30 % manifestó haberse comprometido personalmente a seguir a Jesús.⁹

Europa

Uno de cada seis europeos tiene entre 15 y 29 años. Un estudio publicado de 2018 titulado Europe’s young adults and religion (Los jóvenes europeos y la religión), revela que en la República Checa, el 91 % de los jóvenes adultos se considera sin filiación religiosa, mientras que en el Reino Unido, Francia, Bélgica, España y los Países Bajos, entre el 56 % y el 60 % dijeron que nunca asisten a servicios religiosos, y entre el 63 % y el 66 % dijeron que nunca oran. Según Bullivant, el investigador a cargo, muchos jóvenes europeos «habrán sido bautizados y luego nunca volverán a cruzar la puerta de una iglesia». La identidad religiosa cutural no se transmite de padres a hijos, sino que desaparece.

Regiones con población juvenil en aumento

Asia

Asia es una región geográfica, cultural y socioeconómicamente diversa. Una gran parte de la ventana 10/40 está cubierta en la región Asia-Pacífico, así como la mayoría de los gobiernos opresores religiosos del mundo. En Asia y en el Pacífico viven más de 1100 millones de jóvenes. Los jóvenes de Asia representan más del 25 % de la población. En la región, la persecución religiosa es uno de los mayores problemas a los que se enfrentan los jóvenes creyentes y aquellos que buscan la verdad. Por ello, durante muchas décadas, la evangelización creativa en países de acceso limitado y la evangelización relacional que satisface tanto las necesidades físicas como espirituales de las personas, especialmente de los jóvenes, han sido enfoques efectivos para compartir el evangelio en la región. El informe Global youth report (Informe mundial sobre la juventud) de One Hope reveló que solo el 11 % de los adolescentes son cristianos, el 50 % se identifica con otras religiones y el 39 % se declara agnóstico.

África

Para el año 2022, África se perfila como el continente más joven del mundo, con el 60 % de su población con 25 años o menos —frente a una media mundial del 25 %, con una edad media de 19,7 años—. Además, se proyecta que África registre el mayor crecimiento de la juventud, con un 42 % de sus jóvenes en el rango de edad de 15 a 24 años para el año 2030, y se espera que esta cifra se duplique para el año 2080 en comparación con los datos actuales.

África no solo se destaca como el continente más joven del mundo, sino que también se prevé que albergará a la mayoría de los jóvenes para el año 2067, con el el 67 % de la población infantil del mundo viviendo en África. Este perfil juvenil de la población africana podría representar su potencial más estratégico para el movimiento cristiano mundial. 

El informe Cultura juvenil global de One Hope reveló que África cuenta con el mayor porcentaje de adolescentes cristianos comprometidos, alcanzando un 28 %, en comparación con el 17 % de todos los demás continentes juntos.¹⁰ Esto significa que, al considerar las misiones, no solo es importante tener en cuenta la participación de África, sino que también los mismos africanos deben estar preparados para liderar la mayor fuerza misionera que pueda ofrecerse al mundo. 

La visión global

A nivel mundial, el número de adolescentes cristianos comprometidos es muy bajo. Aunque el 43 % afirma que el cristianismo es su religión, solo el 7 % muestra creencias y comportamientos que indican un compromiso real con su vida cristiana.¹¹

Discipulando a los jóvenes

La familia como principal centro de aprendizaje

En el discurso de despedida de Moisés en Deuteronomio 6, él encarga a los hijos de Israel que no olviden a Dios y su ley, e indica que las enseñanzas que han recibido deben estar arraigadas en sus corazones y deben ser transmitidas a sus hijos. Parece que Dios enfatiza que el hogar es el principal centro de aprendizaje y que los padres son los principales maestros. Es crucial que los líderes de la iglesia consideren cómo fortalecer a la familia y equipar a los padres para llevar a cabo la tarea del discipulado. 

El Nuevo Testamento introduce la analogía de la familia de Dios para ayudarnos a tener una visión bíblica de la juventud en la Iglesia. En Mateo 12:46-50, cuando sus discípulos le dijeron que su madre, hermanos y hermanas estaban fuera buscándole, Jesús respondió definiendo a su verdadera familia; él dijo: «Cualquiera que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos es mi hermano, mi hermana y mi madre». Esta declaración es buena y aterradora al mismo tiempo. Es buena en el sentido de que formamos parte de una familia más amplia; pero aterradora en el sentido de que, a menos que nuestros jóvenes se vuelvan al Señor, no son verdaderamente familia. Los cristianos experimentan un nuevo nacimiento espiritual mediante la gracia y el amor de Dios a través de Jesús, convirtiéndose en hermanos y hermanas al ser adoptados en la familia de Dios. La Iglesia tiene el llamado de vivir como una familia de hermanos con un Padre común. Pablo, en sus cartas, menciona cuatro veces que los creyentes son justificados por Dios y luego adoptados en la familia de Dios. La justificación implica ser declarado justo ante Dios, mientras que la adopción se refiere a nuestra relación con él. 

Para maximizar esta bendición para las misiones, el primer paso es superar las barreras de desconfianza, indiferencia y desconexión emocional generadas por los adultos en nuestras iglesias. Es crucial entrar en el mundo de los jóvenes para establecer confianza, generar atención y construir relaciones. En última instancia, los jóvenes no están interesados en programas, lo que realmente necesitan son relaciones significativas con adultos que se preocupen por ellos.

El modelo de la encarnación

Los jóvenes del siglo XXI enfrentan desafíos significativamente diferentes, lo que nos lleva a reflexionar sobre cómo alcanzarlos de manera efectiva. Proponemos volver al modelo de encarnación,¹² el modelo de discipulado mostrado por Jesús, Pablo y la Iglesia primitiva. Dios envió a su Hijo, Jesucristo, a vivir entre las personas, como se muestra especialmente en Juan 1:1 y 1:14. El Hijo de Dios vino a vivir entre la gente, en su cultura, incluso cuando aún eran pecadores. Este ministerio encarnado de Jesús refleja la intención de un Dios misionero. 

Andrew Root se refiere a este modelo de encarnación como ministerio juvenil relacional.¹³ Root propone la necesidad de «ir más allá de ver las relaciones como simples herramientas de influencia y avanzar a ver la hermosa realidad interior como la invitación a compartir el lugar del otro, a estar con el otro tanto en la alegría como en el sufrimiento y así dar testimonio de Cristo entre nosotros». Es en estas relaciones donde los adultos que encarnan la palabra de Dios pueden ayudar a los jóvenes a comprender lo que significa vivir la vida desde una cosmovisión bíblica. 

Esto elimina la presión del ministerio juvenil relacional que suele estar enfocado en lograr un fin específico a través de la relación. En cambio, la relación misma se convierte en el fin. Es el lugar donde Cristo es el fin último, donde tanto el adulto como el joven encuentran a Cristo. Lo que realmente importa no es la capacidad del joven para alcanzar ciertos objetivos, como ser más espiritual o convertirse al cristianismo, sino simplemente ser una persona junto al adulto, lo que solo es posible a través de Jesucristo, que murió y resucitó como nuestro hermano humano. Root afirma: «Ponernos en el lugar del otro toma forma cuando nos situamos plenamente en la realidad del otro, negándonos a apartar la mirada incluso de su horror más oscuro (…)».¹⁴ Así como Jesucristo en su muerte y resurrección se puso plenamente nuestro lugar, también nosotros debemos imitarle y actuar igual con los jóvenes. 

No basta con que nuestros jóvenes escuchen la predicación del evangelio si no nos ven vivir a la luz del mismo. En vista de la futura evangelización del mundo, nuestra prédica debe ir acompañada de un testimonio coherente en nuestras vidas, y esto solo es posible en el contexto de relaciones auténticas y significativas. Un joven que busca un espacio seguro debe encontrarlo en estas relaciones en las que se vive el evangelio, se conoce y se perdona el pecado, se fomenta el crecimiento y se recibe la corrección con entusiasmo para seguir creciendo espiritualmente. La vida y la teología no pueden separarse; la teología se desarrolla desde dentro de la vida real y la existencia informada por las Escrituras. 

Compromiso con las Escrituras

Recientemente, el Barna Group llevó a cabo la investigación Generación abierta, un estudio sobre la juventud mundial (con una muestra de 25000 jóvenes de 13 a 17 años de 26 países), que pretendía averiguar cómo se relacionan los jóvenes con Jesús, la Biblia y la justicia social. La investigación descubrió que aunque el 50 % de los jóvenes tiene una alta opinión de la Biblia como palabra inspirada e inerrante de Dios, solo alrededor del 36 % ha recibido enseñanza de las Escrituras por parte de un adulto y alrededor del 42 % ha sido guiado sobre cómo aplicar la Biblia a la vida diaria. Además, según el informe de One Hope, más de la mitad de los adolescentes a nivel global admite que nunca ha leído textos religiosos por su cuenta. ¿Cómo ayudar a los jóvenes a que conecten con la Palabra de Dios? ¿Cómo ayudarlos a apreciar que la Palabra de Dios es relevante en sus vidas y situaciones?

En 2019, Lifeway Research encuestó a 2000 padres cuyos hijos ahora son jóvenes adultos para identificar los indicadores de salud espiritual más relevantes. El estudio mostró que el predictor más significativo de salud espiritual era que el niño leyera regularmente la Biblia en su etapa de crecimiento. El 88 % de los padres cristianos comprometidos con niños de entre 6 y 9 años afirman que sus hijos estudiaban la Biblia al menos una vez a la semana. Sin embargo, a medida que los niños crecen y entran en la adolescencia, los padres tienden a dejar que se ocupen de la lectura de la Biblia por su cuenta, lo que provoca un descenso en el compromiso con las Escrituras. ¿Cómo podemos cambiar esta situación? Como padres y adultos mayores, debemos dar ejemplo de cómo interactuamos con la Palabra de Dios, además de acompañar a nuestros jóvenes en su lectura, meditación y aplicación de estas palabras de vida. Una vez más, las relaciones tanto en la familia como en la iglesia son fundamentales.

Desafíos en las culturas juveniles 

La cultura juvenil contemporánea se ve influenciada por movimientos filosóficos y moldeada por la era digital, lo que ha dado lugar a pesadas cargas mentales y a cambios en las preocupaciones globales. 

La era de la posverdad

La cultura actual puede caracterizarse como una cultura de la posverdad. El debate sobre si la verdad es absoluta o relativa sigue ocupando las aulas escolares, los hogares, las aulas universitarias y los lugares de trabajo. Frases como «Estoy viviendo mis verdades» son ahora más comunes que nunca. La distinción entre hechos y valores, donde los valores se consideran personales en lugar de públicos, está creciendo significativamente. La pérdida de la Verdad tiene graves consecuencias en la vida real. El 75 % de los jóvenes adultos afirman no estar seguros de su propósito en la vida, y la mitad de ellos sostiene que «no existe un valor absoluto asociado a la vida humana».¹⁵

¿Cómo podemos criar a una generación de jóvenes que fundamente todos los aspectos de su vida en la Verdad? Si más de la mitad de los adolescentes creen que todas las religiones enseñan verdades igualmente válidas, y el 40 % de los adolescentes que se identifican como cristianos admiten que nunca leen la Biblia, surge la pregunta de cómo podemos ayudar a nuestros jóvenes a reconocer que el cristianismo es la «Verdad total».¹⁶ 

La respuesta es volver a las Escrituras, leerlas, predicarlas y vivirlas. Debemos formar a nuestros jóvenes en apologética y equiparlos con habilidades para participar en espacios públicos con el fin de demostrar que el cristianismo es la única fe que ofrece una visión integral de la vida. Es importante mostrarles que el cristianismo no se limita a ser una lista de verdades proposicionales, sino que la Verdad es una persona: Jesucristo. 

Redes sociales

Vivimos en la era digital, la cual está en constante expansión. Internet ha transformado literalmente la cultura, con mayor impacto en generaciones que nunca conocieron un mundo sin ella. Craig Van Gelder afirma que «internet representa la metáfora cultural dominante del mundo del siglo XXI: descentralizado, altamente participativo, fluido, autoorganizado y geográficamente disperso».¹⁷

Junto con los avances en la tecnología de la información, nuestra era digital ha generado no solo una cultura cibernética, sino también un mundo virtual que ha cambiado las nociones de tiempo y espacio en la vida social y las relaciones. 

Salud mental

La conversación sobre salud mental no puede estar completa sin considerar el impacto de la pandemia. La crisis de COVID-19 ha generado situaciones alarmantes en términos de salud mental y bienestar. Un estudio de 2020 publicado en el Journal of Population and Social Studies sobre los efectos de la COVID-19 en la salud mental de más de 1000 estudiantes de enseñanza superior en China, Indonesia, Malasia y Tailandia, reveló que el 38 % de los estudiantes encuestados habían experimentado depresión y ansiedad «leve a moderada», mientras que más del 20 % declararon experimentar «ansiedad grave» con regularidad. Las investigaciones realizadas en Brasil¹⁸ y América Latina¹⁹ también muestran que la pandemia tuvo un impacto significativo en la salud mental de adolescentes y jóvenes. El aislamiento y la falta de contacto humano no hacen sino demostrar que la comunidad es clave para la plenitud del ser humano. Por tanto, es cierto que entablar relaciones permitirá resolver varias cuestiones.

Preocupación mundial

Barna preguntó a los adolescentes qué problemas mundiales les preocupan más. En orden de importancia, la respueta fue: la pobreza extrema, el cambio climático global, el abuso sexual, el desempleo y la corrupción política. 

¿Ofrece la Iglesia respuestas a estas inquietudes? Mientras los jóvenes se preguntan cómo pueden influir sus vidas en el mundo, ¿seremos capaces de guiarlos hacia los lugares, métodos y soluciones adecuados? Los jóvenes expresan su frustración porque perciben que los líderes cristianos no son activos más allá de los muros de la iglesia y ven la iglesia solo como un lugar de culto. La iglesia necesita ampliar su comprensión de la redención —no limitarse a que somos salvados de algo, también somos salvados para algo—, y retomar la tarea para la que fuimos creados originalmente.

Conclusión

¿Cuál es el significado de estas estadísticas y reflexiones a la luz de las misiones y la evangelización mundial? Si África es ahora el continente más cristiano, se deduce que el rostro del cristianismo en 2050 será probablemente una joven africana. ¿Qué verán? ¿Qué tipo de cristianismo encarnarán? El misionero Andrew Walls ha dicho con razón que «lo que ocurra en las iglesias africanas en la próxima generación determinará la forma de la historia de la Iglesia en los siglos venideros; el tipo de teología más característica del cristianismo del siglo XXI puede depender de lo que haya ocurrido en las mentes de los cristianos africanos en el ínterin».²⁰ ¿Qué deben hacer los líderes africanos? ¿Cómo están preparando a los jóvenes para la evangelización? Si América Latina, Asia y América del Norte tienen cada vez menos población joven, ¿qué significa esto para la evangelización mundial en términos de fuerza misionera?

Creemos que debemos repensar nuestros modelos de discipulado y abrazar el modelo de encarnación que invita a profundas relaciones auténticas que permiten a los jóvenes florecer como seres humanos mientras nos encontramos con Jesús juntos. Las familias deben estar equipadas para llevar a cabo el trabajo de discipulado de sus hijos y de aquellos que el Señor les traiga, expandiendo la familia cristiana a quienes buscan la verdad. Debemos considerar cómo ayudar a los jóvenes a vivir vidas integrales, en contraposición al enfoque dualista moderno de la vida en el que la verdad se vive por separado en privado y en público. Por último, debemos imaginar formas creativas de entrar en el mundo digital para alcanzarlos y, por supuesto, comprometernos en la oración, conscientes de la envergadura del campo de misión que tenemos por delante.

Notas finales

1. United Nations, Department of Economic and Social Affairs, Population Division (2022) [Naciones Unidas, Departamento de Asuntos Económicos y Sociales]. «World population prospects 2022» [Perspectivas de la población mundial en 2022(en línea).https://population.un.org/wpp/Download/Standard/Population/. [Consulta: 24/8/2023].
2. Global youth culture: Latin America report (Cultura juvenil global: América Latina), One Hope. https://globalyouthculture.oriocdn.com/wp-content/uploads/2021/07/LA-GYC-Report_N.pdf. [Consulta: 23/8/2023].
3. Al parecer, España fue incluida en el informe sobre América Latina porque está unida a esos países por el idioma.
4. United Nations, Department of Economic and Social Affairs, Population Division (2022) [Naciones Unidas, Departamento de Asuntos Económicos y Sociales]. «World population prospects 2022» [Perspectivas de la población mundial en 2022], (en línea).https://population.un.org/wpp/Download/Standard/Population/. [Consulta: 24/8/2023].
5. Brasil no fue incluido en el informe Cultura juvenil global: América Latina probablemente porque fue colonizado por Portugal, mientras que todos los demás países fueron colonizados por España. Por lo tanto, el idioma, las costumbres y las tradiciones son muy diferentes.
6. Global youth culture: Brazil report (Cultura juvenil global: Brasil). [Consulta: 23/8/2023].
7. United Nations, Department of Economic and Social Affairs, Population Division (2022) [Naciones Unidas, Departamento de Asuntos Económicos y Sociales]. «World population prospects 2022» [Perspectivas de la población mundial en 2022], (en línea).https://population.un.org/wpp/Download/Standard/Population/. [Consulta: 23/8/2023].
8. Global youth culture: United States report (Cultura juvenil global: Estados Unidos). [Consulta: 25/8/2023].
9. Nick Hartman: «A Reflections on Barna’s Open Generation Report» (Reflexiones sobre el informe Open generation de Barna), Youth Pastor Theologian, 26/10/2022.
10. Global youth culture: insights from a digital generation (Cultura juvenil global: perspectivas desde una generación digital), One Hope. . [Consulta: 25/7/2023].
11. Ib.
12. Diferentes modelos y enfoques ministeriales han sido utilizados en el pasado por diferentes personas. Está el enfoque congregacional inclusivo, que trata de integrar a los jóvenes en la vida congregacional. También está el enfoque preparatorio, que prepara a los jóvenes para participar en la vida de las iglesias existentes como líderes, discípulos y evangelizadores. También está el enfoque misional, que considera a la juventud como una misión en sí misma. Por último, está el enfoque estratégico, que prepara a los jóvenes para plantar una nueva iglesia. Otros han popularizado el modo evangelístico-atractivo, que consiste en atraer a los adolescentes a la iglesia introduciendo algunos elementos de la cultura en el programa de pastoral juvenil. Todos estos enfoques son maravillosos, con diferentes índices de éxito y fracaso.
13. Andrew Root: Revisiting relational youth ministry: from a strategy of influence to a theology of incarnation [Revisando el ministerio juvenil relacional: de una estrategia de influencia a una teología de la encarnación]. IVP Books, 2007.
14. Ib., 83.
15. George Barna: «Millennials in America: new insights into the generation of growing influence» [Millennials en Estados Unidos: nuevas perspectivas sobre una generación cada vez más influyente]. Cultural Research Center. Octubre 2021. https://www.arizonachristian.edu/wp-content/uploads/2021/10/George-Barna-Millennial-Report-2021-FINAL-Web.pdf.
16. Nancy Pearcey: Total truth: liberating Christianity from its cultural captivity [Verdad total: libera el cristianismo de su cautiverio cultural]. Wheaton: Crossway, 2008.
17. Craig Van Gelder y Dwight J. Zscheile: The missional church in perspective, mapping trends and shaping the conversation [La iglesia misional en perspectiva: tendencias y debate]. Grand Rapids, MI: Baker Academic, 2011, 128.
18. «Mental health of Brazilian adolescents during the Covid-19 pandemic». https://www.arca.fiocruz.br/handle/icict/58534. [Consulta: 23/8/2023].
19. «The impact of COVID-19 on the mental health of adolescents and youth». https://www.unicef.org/lac/en/impact-covid-19-mental-health-adolescents-and-youth. [Consulta: 23/8/2023].
20. Andrew F. Walls: Ensayo en Religion in a pluralistic society (Religión en una sociedad pluralista). 180–90. Leiden:Brill, 1976.