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El islam

Seung-hyun (Nathan) Chung & Tharwat Wahba

El islam hoy

En 2011, el Centro de Investigaciones Pew predijo que la población musulmana crecería un 35 % para el 2030, año en el que alcanzaría las 2200 millones de personas en comparación con las 1600 millones que había en 2010. Tras este aumento, los 72 países que en 2010 tenían un millón de habitantes musulmanes o más pasarían a ser 79. Con esta tasa de crecimiento, podríamos anticipar que los musulmanes conformarán el 26,4 % de la población mundial que se estima que llegará a los 8300 millones de habitantes en 2030.¹

Si bien los habitantes de la región de Medio Oriente y del norte de África son predominantemente musulmanes, en 2010, solo uno de cada cinco musulmanes vivía en esa parte del mundo. En la región de Asia-Pacífico, por ejemplo, se espera que la población musulmana alcance casi los 1500 millones para 2050, frente a los aproximadamente 1000 millones que había en 2010. Se espera que la cantidad de musulmanes de Medio Oriente y del norte de África aumente de unos 300 millones en 2010 a más de 550 millones en 2050, mientras que, en el África subsahariana, se estima que el número se duplique y pase de unos 250 millones en 2010 a casi 670 millones para 2050. Además, se cree que en regiones donde la población musulmana es una minoría, como en Europa y en Norteamérica, la cantidad total de practicantes del islam será mayor.²

Religión diversa y en desarrollo

Luego de un estudio anterior en el que se realizaron más de 38 000 encuestas presenciales en más de 80 idiomas, Pew comunicó que los musulmanes declararon unánimemente que hay un solo Dios y que Mahoma es su profeta. Sin embargo, al mismo tiempo, también manifestaron importantes desigualdades según cuál era su nivel de compromiso religioso, si tenían una actitud receptiva a las diferentes interpretaciones de su fe y si admitían que existen varias sectas y movimientos.

Algunas de estas diferencias se pueden ver con claridad a nivel regional. Por ejemplo, para los musulmanes entrevistados provenientes de países del África subsahariana, del Sudeste Asiático, de Asia Oriental, de Medio Oriente y del norte africano la religión es fundamental en sus vidas. En cambio, particularmente, en las vidas de los musulmanes de los países que acaban de salir del comunismo, la religión cumple un rol mucho menos esencial. Apenas la mitad de los encuestados provenientes de Rusia, la península balcánica y repúblicas exsoviéticas de Asia Central dicen que la religión es vital para ellos.³

El islam es una religión diversa y multifacética cuyos seguidores provienen de diferentes culturas, países y contextos históricos. El modernismo está irrumpiendo en las regiones islámicas tradicionales causando múltiples cambios que están impulsándolas a la modernización, hecho que no deberíamos simplificar demasiado, ya que de por sí el islam, que está presente desde Indonesia hasta Marruecos, es extremadamente heterogéneo, al igual que los cambios que está experimentando.

En movimiento

No debemos pasar por alto la dinámica migratoria de los musulmanes. Se calcula que, entre mediados de 2010 y mediados de 2016, emigraron a Europa unos 3,7 millones de musulmanes que, para 2050, llegarían a representar un máximo del 14 % de la población del continente.⁴ A modo de ejemplo, en ese periodo, Alemania recibió unos 670 000 refugiados, de los cuales aproximadamente el 86 % eran musulmanes, y a otros 680 000 inmigrantes regulares provenientes de fuera de la Unión Europea, de los cuales solo el 40 % (un porcentaje menor) eran musulmanes. En total, durante esos años, Alemania acogió cerca de 1,35 millones de inmigrantes de los cuales unos 850 000 eran musulmanes.⁵ 

La migración de los musulmanes durante esta era de la globalización los está llevando a interactuar con nuevas culturas y religiones de otros lugares. Por consiguiente, tanto ellos como su propia religión están atravesando muchos cambios y desafíos internos y externos que están haciendo que su diversidad aumente.

Influencia mundial del islam

Al haber migrado por todo el mundo en la era de la globalización, hoy son muchos más los musulmanes que viven fuera del mundo árabe que los que viven dentro de él. Mientras que aproximadamente el 61 % vive en la región de Asia-Pacífico, tan solo el 20 % vive en Medio Oriente y el norte de África.⁶ Las comunidades de musulmanes han migrado a varias partes del mundo, estableciendo comunidades diaspóricas que han contribuido a que las sociedades de sus países de acogida se vuelvan más multiculturales y más diversamente ricas al entrelazarse con sus tejidos culturales, económicos y sociales. Asia, en particular, alberga la increíble cifra de mil millones de musulmanes. Es habitual, por tanto, que los asiáticos compartan vecindarios con los musulmanes y, en su vida diaria, entablen conversaciones sobre libertad religiosa, derechos de la mujer, terrorismo, migración, diálogo interconfesional, temas que se entremezclan con debates sobre el islam y los musulmanes. Estas cuestiones son complejas y varían según los contextos, por lo que es necesario analizarlas y comprenderlas teniendo en cuenta los distintos matices.

En el plano secular

La iglesia cristiana debe comprender adecuadamente el crecimiento del islam. Algunos países islámicos son seculares; otros imponen la sharía. Algunos protegen a las minorías cristianas, otros las discriminan. Los musulmanes viven entre las poblaciones más ricas del mundo, pero también entre las más pobres. Su espectro, que es realmente diverso, va desde eruditos de talla mundial hasta terroristas. Además, los musulmanes adinerados tienen un enorme poder financiero que influye enormemente en la economía mundial. 

Concretamente, esto se puede ver reflejado en el ámbito del deporte. La Copa Mundial de la FIFA de 2022, que tuvo lugar en Catar, puso en evidencia la situación de Medio Oriente por primera vez en la historia de la Copa Mundial. La Copa Asiática de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC, por sus siglas en inglés) también transcurrió en Catar en el mes de febrero de 2024. Asimismo, varios equipos de la Premier League de Inglaterra (EPL, por sus siglas en inglés) pertenecen a personas acaudaladas de Medio Oriente, quienes, a través de sus abundantes recursos financieros los dotan de una considerable influencia. El equipo más representativo, el Manchester City, ha ganado cuatro veces el EPL en las últimas cinco temporadas y se dice que es el equipo más competitivo del mundo. Pertenece a City Football Group (CFG), una empresa con sede en los Emiratos Árabes Unidos cuya propiedad mayoritaria corresponde a Abu Dhabi United Group que, a su vez es administrado por el jeque Mansour bin Zayed Al Nahyan, miembro de la familia real de Abu Dabi.

Pese a todo esto, se calcula que también en los países o comunidades cuya población es mayormente musulmana se encuentra una significativa proporción de la población pobre mundial. Según el Centro de Investigaciones Pew, en 2010, cerca de dos tercios de la población musulmana del mundo vivía en países donde los musulmanes eran mayoría o representaban una minoría importante.⁷ Es sabido que varios países mayormente musulmanes, entre ellos, Afganistán, Somalia, Sudán, Yemen y algunos países del África subsahariana, poseen altos índices de pobreza y se enfrentan a importantes desafíos de desarrollo.

La iglesia cristiana debe comprender adecuadamente el crecimiento del islam.

En la iglesia cristiana

La influencia del islam ha incentivado a que la iglesia cristiana esté inevitablemente más interesada en los musulmanes y su religión, aunque a las congregaciones que no han tenido vecinos musulmanes les cuesta comprender bien su religión y su diversidad e incluso les tienen fobia. La islamofobia también es común en Corea. Jeeyun Kwon resume su preocupación en tres áreas: el matrimonio, los informes de la CIA y el crecimiento de la población musulmana. «El plan de los musulmanes es expandir el islam en Corea casándose con coreanas. En uno de sus informes, la CIA explica su estrategia de ocho pasos de conquista mundial del islam y que su método para lograrlo en la sociedad coreana consiste en infiltrar a 150 000 musulmanes, si es necesario, utilizando métodos de violencia. Dicho de otra forma, la islamización de Europa será replicada en la sociedad coreana».⁸

Esta es la razón por la que el Movimiento de Lausana ha hecho hincapié en la necesidad de comprender correctamente a los musulmanes y al islam desde que se llevó a cabo el Foro para la Evangelización Mundial en 2004. «Deberíamos enfocarnos en superar el miedo y el prejuicio hacia los musulmanes e incentivar a las personas a cultivar relaciones positivas con ellos, proporcionándoles información precisa sobre su religión y diversidad para que aprendan cómo vivir cerca de ellos».⁹

Las misiones cristianas y el islam

En medio de esta complejidad, la relación de la misión cristiana con el islam difiere de una región a otra. En algunos países caracterizados por el pluralismo religioso como Indonesia, la obra misionera está avanzando gracias a que los cristianos pueden ingresar con visa de pastor y llevar a cabo la obra misionera junto con las denominaciones y los ministros de los seminarios locales. Sin embargo, muchos países siguen sin permitir el ingreso de misioneros, sobre todo si son pastores. Muchas naciones condenan con pena de muerte la conversión de locales al cristianismo.

En esta situación, las misiones cristianas harían bien en aplicar en su trabajo dos de las posturas del Movimiento de Lausana. En primer lugar, el Movimiento ha insistido sistemáticamente en que, a pesar de las diferencias, se respete, se ame y se trate como a prójimos a las personas de otras religiones, incluidos los musulmanes.

En segundo lugar, el cristianismo debe analizar detenidamente y comprender las características peculiares del islam y de los musulmanes en cada contexto para poder transmitir el evangelio de Cristo de manera completa.

Oportunidades y desafíos para cumplir la gran comisión

Los cambios rápidos que están sucediendo en el mundo en todas las áreas dificultan la posibilidad de predecir qué sucederá en el futuro. Se están produciendo cambios políticos drásticos a medida que colapsan alianzas regionales e internacionales y se precipitan los conflictos entre naciones. Muchos países también están lidiando con conflictos internos entre tribus, grupos étnicos y religiones. Los cambios económicos acelerados han desencadenado distintas formas de sufrimiento en la mayoría de los países. Todas estas alteraciones hacen que sea complicado predecir el estado de la gran comisión para 2050. Sin embargo, intentaremos proyectar una visión para el futuro a la luz de la información que tenemos disponible y los avances recientes. Más allá de todo lo que podamos predecir del futuro, debemos esperar, en la soberanía de Dios, que el Espíritu Santo obre creando una nueva realidad que supere nuestras expectativas humanas.

Más allá de todo lo que podamos predecir del futuro, debemos esperar, en la soberanía de Dios, que el Espíritu Santo obre creando una nueva realidad que supere nuestras expectativas humanas.

Oportunidades y desafíos dentro del islam

No debemos separar las oportunidades de los desafíos. Cada desafío conlleva una oportunidad y, del mismo modo, cada oportunidad supone desafíos. Intentaremos resumir algunas de las oportunidades y los desafíos, pero dejaremos margen para estudios más profundos y exhaustivos.

El mundo islámico está pasando y pasará por muchos cambios, tanto en términos del pensamiento religioso como de la relación entre los musulmanes y las minorías no musulmanas que habitan en él. Estos cambios impactan directamente sobre la posibilidad de lograr la gran comisión entre los musulmanes.

El pensamiento religioso islámico se sitúa entre dos extremos. Por un lado, está el enfoque fundamentalista de la ideología del salafismo yihadista, que aboga por regresar a la práctica original del islam imitando al Profeta, sus seguidores y los antiguos califas. Lo más probable es que estas ideologías sigan afectando al mundo musulmán y al resto del planeta en muchos aspectos.¹² Los salafistas yihadistas adoptan un enfoque violento para difundir el islam y establecer un califato islámico. El mundo ha sido testigo de lo que han hecho grupos terroristas como ISIS, Boko Haram en África occidental y central y los Hermanos Musulmanes en Egipto, entre otros. Su ideología se basa en la idea de que Alá les ordena librar la yihad portando armas contra el occidente infiel y contra los gobernantes musulmanes que, desde su punto de vista, no aplican la sharía.

Este desafío religioso acarrea aspectos negativos que afectan al mundo cristiano y su testimonio. Los salafistas buscan expulsar a las minorías de los países islámicos, tal como hemos visto que lo han hecho en Irak, Siria, Palestina, Sudán y otros países a través de la discriminación, la persecución y las restricciones a la prestación de servicios cristianos en las comunidades islámicas.

Cada desafío conlleva una oportunidad y, del mismo modo, cada oportunidad supone desafíos.

A pesar de su influencia negativa, estas prácticas violentas han abierto puertas a los jóvenes musulmanes que están expuestos a perspectivas globales sobre la libertad de pensamiento y los derechos humanos para que comparen la ideología del salafismo yihadista y sus hábitos agresivos con las ideas del cristianismo que enarbolan la paz, la no violencia y el perdón. Este contraste los incita a buscar la fe cristiana y seguirla. Es probable que las prácticas yihadistas islámicas continúen en Oriente y se expandan Occidente. Aunque todo esto supone desafíos, al mismo tiempo abre puertas a oportunidades para que Cristo sea presentado como el Príncipe de Paz a través de la gran comisión. 

Por otro lado, en el otro extremo está la ideología islámica liberal, influida por las corrientes intelectuales occidentales que someten todo a escrutinio y crítica, incluso las fuentes y las prácticas religiosas islámicas. Sus defensores aparecen en círculos académicos y mediáticos. Los musulmanes liberales siguen los principios de crítica e interpretación científica del Corán y del hadiz y piden que se purifique la herencia islámica de los llamados a la violencia y el extremismo y de ideas que contradigan la ciencia y la razón. Estas enseñanzas pueden conducir a algunas personas al ateísmo o a que no cumplan necesariamente las obligaciones religiosas islámicas, mientras que otros podrían volverse al cristianismo para buscar respuestas a sus preguntas.¹³

Entre estas dos ideologías, la del salafismo yihadista y la del islam liberal, existen muchas escuelas intelectuales. Muchos musulmanes alrededor del mundo practican el islam popular y conocen poco de la historia y las complejidades de su fe. No obstante, el movimiento intelectual en el islam crea tanto desafíos como oportunidades para los cristianos. Ayudará a expandir el horizonte de los cristianos que participan en la presentación del evangelio a los musulmanes permitiéndoles estudiar más sobre estos avances. Quienes trabajen entre musulmanes deberán comprender cómo se desarrolla el pensamiento islámico para tender nuevos puentes que los conecten con ellos y para transmitir el mensaje del evangelio de una forma moderna que se acerque a las mentes y las ideas islámicas.

Oportunidades y desafíos dentro de la iglesia

En cuanto a la misión de la iglesia hacia el islam, los cristianos han dado muchos pasos para cumplir la gran comisión entre los musulmanes. Cada vez llevan a más personas de trasfondo musulmán a convertirse al cristianismo. Ahora que han diversificado sus métodos de servicio y estrategias, son más maduros e impactantes. Y aunque hay resultados alentadores, los desafíos persisten. La iglesia occidental que ha enviado a muchos misioneros y obreros al mundo islámico durante los últimos dos siglos necesita darse cuenta de los cambios que está enfrentando la misión. Hoy la presencia de misioneros occidentales en muchos países islámicos resulta complicada por razones políticas, religiosas, culturales y de seguridad, por lo que se espera que en la próxima era, la función que cumplen en el mundo islámico sea menor. Aun así, tienen oportunidades para cumplir la gran comisión a través de sus talentos en educación, tecnología, administración, recaudación de fondos y creación de redes entre iglesias y organizaciones misioneras.¹⁴

Por otro lado, la presencia de la iglesia en el mundo islámico es una herramienta importante para cumplir la gran comisión. A pesar de que la iglesia en el mundo islámico se ha enfrentado a persecución, discriminación y la migración hacia occidente, es alentador ver que la iglesia cada vez es más consciente de la función que cumple en la misión de Dios y que está corrigiendo las experiencias negativas del pasado.

Ha aumentado la conciencia misionera de la iglesia en el mundo islámico, donde existen oportunidades educativas sobre la labor misionera en las facultades de teología, en las iglesias nacionales y en las organizaciones misioneras. Además, también ha aumentado la cantidad de nacionales que se interesan en la obra misionera, tanto entre quienes sirven fuera de sus países para alcanzar nuevos campos de Medio Oriente como entre quienes se encuentran en la diáspora. La cantidad de misioneros a corto y a largo plazo a los países islámicos también se ha incrementado. Los canales satelitales y las redes sociales han cumplido una función significativa a la hora de alcanzar musulmanes con el mensaje del evangelio. Se prevé que el avivamiento de la iglesia en el mundo musulmán para lograr la gran comisión continuará su curso hasta 2050 y que la cantidad de obreros nacionales trabajando dentro y fuera de sus países aumentará.

Uno de los factores más importantes para que los cristianos orientales lleven el mensaje del evangelio a los musulmanes es que derriben la barrera del miedo que los ha paralizado.

Uno de los factores más importantes para que los cristianos orientales lleven el mensaje del evangelio a los musulmanes es que derriben la barrera del miedo que los ha paralizado. Durante 14 siglos, la persecución, la discriminación y la privación de derechos que han sufrido los cristianos de oriente ha levantado una barrera de miedo perjudicial hacia los musulmanes. Sin embargo, debido al aumento de conciencia del rol misionero y los desarrollos de derechos políticos y humanos, algunos cristianos han superado esta barrera y han comenzado a intentar cumplir la gran comisión.¹⁵ Se espera que la valentía de la iglesia nacional crezca y que comparta su fe sin miedo en los próximos años.

También se espera que la cooperación entre las iglesias y las organizaciones misioneras occidentales y la iglesia en el mundo islámico aumente de forma interactiva por medio de la igualdad, la comprensión y la colaboración. Cada parte tiene potencial y recursos que pueden contribuir a la consecución de la gran comisión.

Si la voz de la iglesia occidental pide libertad de pensamiento y elección de religión, y si la iglesia oriental continúa presentando un testimonio cristiano vivo de su fe y si las iglesias de ambas partes del mundo se unen en un acuerdo estratégico caracterizado por la confianza mutua, la sumisión, la oración, la obra del Espíritu Santo y el intercambio de recursos, habrá un verdadero avivamiento para lograr la gran comisión entre los musulmanes.¹⁶

La iglesia en el mundo islámico y en la diáspora sabe mucho sobre el islam y los musulmanes y sobre cómo tratar con ellos y compartirles mensaje del evangelio con conciencia e inspiración. La iglesia de la diáspora puede ser una herramienta efectiva para guiar a la iglesia occidental a transmitir el mensaje del evangelio a los musulmanes que viven en países donde un ambiente de libertad les permite entablar relaciones, amistades y brindar un servicio cristiano amoroso.¹⁷ Todo esto creará oportunidades para cumplir la gran comisión para el 2050.

Recursos

• Gene Daniels, Pam Arlund, y Jim Haney, eds. Fruit to Harvest: Witness of God’s Great Work Among Muslims [De fruto a cosecha: testimonio de la gran obra de Dios entre los musulmanes] (Littleton, Co: William Carey Press, 2019).
• Don Little. Effective Discipling in Muslim Communities: Scripture, History and Seasoned Practices. [Discipulado efectivo en las comunidades musulmanas: Escrituras, historia y experiencias prácticas] (Downers Groves, IL: IVP Academic, 2015). 

Notas finales

1. ‘The Future of the Global Muslim Population’ [«El futuro de la población musulmana global»]. Centro de Investigaciones Pew. 27 de enero de 2011. https://www.pewresearch.org/religion/2011/01/27/the-future-of-the-global-muslim-population/.
2. ‘Muslims’ [«Los musulmanes»]. Centro de Investigaciones Pew. 2 de abril de 2015. https://www.pewresearch.org/religion/2015/04/02/muslims/.
3. ‘The World’s Muslims: Unity and Diversity’ [«Los musulmanes en el mundo: unidad y diversidad»]. Centro de Investigaciones Pew. 9 de agosto de 2012. https://www.pewresearch.org/religion/2012/08/09/the-worlds-muslims-unity-and-diversity-executive-summary/.
4. ‘Europe’s Growing Muslim Population’ [«La creciente población musulmana en Europa»]. Centro de Investigaciones Pew. 29 de noviembre de 2017. https://www.pewresearch.org/religion/2017/11/29/europes-growing-muslim-population/.
5. ‘The Growth of Germany’s Muslim Population’ [«El crecimiento de la población musulmana en Alemania»]. Centro de Investigaciones Pew. 29 de noviembre de 2017. https://www.pewresearch.org/religion/2017/11/29/the-growth-of-germanys-muslim-population-2/.
6. ‘Islam: An Infographic’ [«Una infografía del islam»]. El Movimiento de Lausana. https://lausanne.org/content/islam-an-infographic.
7. ‘The Future of the Global Muslim Population’ [«El futuro de la población musulmana global»]. Centro de Investigaciones Pew. 27 de enero de 2011. https://www.pewresearch.org/religion/2011/01/27/the-future-of-the-global-muslim-population/.
8. Jeeyun Kwon. ‘The Korean Church’s Missional Approach to Korean Islam.’ [«El enfoque misional de la iglesia coreana hacia el islam coreano»] Muslim-Christian Encounter 7 (2014/1), 9-57.
9. ‘Lausanne Occasional Paper No. 49: Understanding Muslims.’ [«Artículo de Lausana N.° 49: entendiendo a los musulmanes»] El Movimiento de Lausana (2004), 4.1. https://lausanne.org/content/lop/understanding-muslims-lop-49.
10. Ibid., 4.2.
11. Ibid., 4.3.
12. Colin Chapman. Cross and Crescent: Responding to the Challenges of Islam, 2nd ed. [La cruz y la medialuna: respondiendo a los desafíos del islam. Segunda edición] (Downers Grove, IL: IVP, 2007), 160.
13. S. Hassan. Christians Versus Muslims in Modern Egypt: the Century-long Struggle for Coptic Equality [Cristianos contra musulmanes en el Egipto moderno: la lucha de un siglo por la igualdad de los coptos]. (Oxford: Oxford University Press, 2003), 222.
14. Michael Kuhn. ‘The Challenge and Promise of Christian Mission to Muslims in a Neocolonial Era’ [«El desafío y la promesa de la misión cristiana a los musulmanes en la era neocolonial»]. Missiology: An International Review 49, No. 1. (2021): 54–68.
15. Tharwat Wahba. The Practice of Mission in Egypt: A Historical Study of the Integration between the American Mission and the Evangelical Church of Egypt, 1854–1970 [La práctica de la misión en Egipto: un estudio histórico de la integración entre la misión estadounidense y la Iglesia Evangélica de Egipto entre 1854 y 1970] (London: Langham Monographs, 2015), 128.
16. Robert D. Woodberry. ‘The Missionary Roots of Liberal Democracy’ [«Las raíces misionales de la democracia liberal»]. American Political Science
17. Paul Borthwick. Western Christians in Global Mission: What’s the Role of the North American Church [Cristianos occidentales en la misión global: ¿qué función cumple la iglesia norteamericana?] (Downers Grove, IL: InterVarsity Press, 2012), 41.