Global Analysis

Amar a nuestro prójimo mundial

la iglesia puede inspirar la acción por el clima en un mundo cambiante

Katharine Hayhoe Ene 2025

Introducción

El amor de Dios por los necesitados y los vulnerables ha inspirado a cristianos a lo largo de la historia a luchar contra el sufrimiento, la persecución y la injusticia. Desde la abolición de la esclavitud en el Reino Unido1 hasta el fin del apartheid en Sudáfrica,2 voces fieles han sido instrumentales a la hora de abogar por los cambios necesarios para «inclinar el arco del universo moral hacia la justicia».3

Hoy, el mundo enfrenta una nueva crisis, las consecuencias de desatender la responsabilidad que Dios nos ha dado sobre lo que Génesis denomina «todo ser viviente» de la tierra. Desde la contaminación hasta el cambio climático, pasando por la pérdida de la naturaleza, las repercusiones que los científicos predijeron hace tiempo4 se están convirtiendo rápidamente en realidad: riesgos crecientes para la salud y las infraestructuras, disminución de recursos alimentarios e hídricos y desplazamiento de comunidades y ecosistemas enteros.5

como científica del clima, no considero que se trate principalmente de cuestiones científicas o medioambientales. El cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad son, en el fondo, problemas morales y espirituales.

Impulsadas principalmente por el consumo de los países ricos y las empresas, las repercusiones de estas crisis recaen de forma desproporcionada sobre los menos responsables: los pobres, los que sufren, los vulnerables y los que aún no han nacido.6 Por eso, como científica del clima, no considero que se trate principalmente de cuestiones científicas o medioambientales. El cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad son, en el fondo, problemas morales y espirituales. Y estos son los problemas a los que creo que estamos llamados a responder, una vez más, con el amor y el compromiso con la justicia7 que están en el corazón de nuestra fe.8

¿Qué está ocurriendo? La realidad del cambio climático

Los argumentos a favor de una acción urgente se basan en pruebas cada vez más numerosas de que los sistemas naturales de la tierra se están acercando a límites críticos.9 A lo largo de la civilización humana, la temperatura media del planeta ha sido tan estable como la del cuerpo humano, con variaciones de solo unas décimas de grado. Sin embargo, solo en el último siglo, esta estabilidad se ha hecho añicos. Desde las observaciones de los termómetros y los satélites hasta las fechas de deshielo y el crecimiento del nivel del mar, está claro que el planeta se está calentando más rápido que en ningún otro momento de la historia de la humanidad: 1,3 grados centígrados hasta ahora, el equivalente a una fiebre planetaria. A medida que el calentamiento se intensifica, afecta cada vez más a todos los aspectos de la vida en este planeta. Nuestras ciudades y comunidades, los sistemas alimentarios e hídricos, las economías y las cadenas de suministro se construyeron para las condiciones estables del pasado. La alteración de esta estabilidad nos pone a todos en peligro.

¿Cómo sabemos que estos cambios son causados por el hombre? Porque, basándonos únicamente en factores naturales —el sol, los volcanes y los ciclos naturales—, la tierra debería estar enfriándose gradualmente actualmente.10 En cambio, nuestro planeta se está calentando rápidamente, y los científicos saben por qué. Casi tres cuartas partes del calentamiento observado producto de emisiones de gases que atrapan el calor procedentes de la extracción y quema de combustibles fósiles, como el carbón, el gas y el petróleo. La quema de combustibles fósiles también es responsable de la contaminación atmosférica que mata a más de 8 millones de personas cada año.11 El resto de las emisiones que atrapan el calor proceden de la deforestación, los residuos y los sistemas alimentarios insostenibles, que también son los principales causantes de la pérdida de biodiversidad y naturaleza de la que depende nuestra propia vida.12

¿Por qué es importante? La urgencia de actuar

A medida que la contaminación por carbono y otros gases que atrapan el calor se acumulan en la atmósfera, en esencia envuelven el planeta con una manta adicional que provoca su calentamiento. Cuanto más se calienta el planeta, más se carga el dado meteorológico en nuestra contra, aumentando la frecuencia e intensidad de peligrosas olas de calor, inundaciones, tormentas y demás.

Por ejemplo, el cambio climático duplicó con creces el riesgo de que las condiciones excepcionalmente calurosas y secas provocaran la mayor temporada de incendios forestales de Canadá en 2023.13 El humo cubrió los cielos de gran parte de Norteamérica, aumentando las visitas a salas de emergencias en lugares tan distantes como la ciudad de Nueva York.14 En la primavera de 2024, una prolongada ola de calor en el sudeste asiático provocó el cierre de escuelas, enfermedades y muertes en toda la región. Se estima que el cambio climático hizo que esta ola de calor fuera al menos cinco veces más probable.15 En el otoño de 2024, unas inundaciones extremas provocaron la destrucción de comunidades y la pérdida masiva de vidas humanas en Europa Central,16 el sureste de Estados Unidos,17 Asia,18 y España.19 En cada uno de esos casos, la intensidad de la tormenta y la cantidad de lluvia que cayó fue mucho mayor de lo que habría sido en ausencia del cambio climático.20

La iglesia no puede ignorar estas cuestiones porque afectan a las mismas comunidades a las que estamos llamados a servir. Aunque las catástrofes nos afectan a todos, no lo hacen por igual. Los que ya son vulnerables, los que no tienen un lugar seguro donde vivir, ni alimentos suficientes para su familia, ni agua limpia para beber, ni acceso a la atención sanitaria básica, son los más afectados, y eso no es justo.

Perspectivas a largo plazo: escenarios para el futuro

El cambio climático ya está exacerbando la desigualdad mundial, la inseguridad alimentaria y los desplazamientos. Cuanto más sigamos por este camino, mayores serán los impactos en los próximos años y décadas. La ciencia tiene claro que la mayor incertidumbre sobre los futuros impactos climáticos no es tecnológica ni científica, sino cómo respondemos los seres humanos. Lo que decidamos hacer hoy determinará la trayectoria de nuestro futuro.

Imaginemos primero «un mundo de inacción», en el que la iglesia y el mundo no logran alterar la trayectoria de las opciones sociales. Muy pronto, las catástrofes, cada vez más frecuentes e intensas, desbordarán los esfuerzos de socorro. Cientos de millones de personas se convertirán en refugiados climáticos, obligados a emigrar debido a los desastres y a las condiciones inhabitables. Esto podría desestabilizar países y contribuir a conflictos en todo el mundo,21 dificultando la labor de la iglesia en muchas regiones y poniendo en peligro a miles de millones de personas.

A continuación, imaginemos «un mundo de liderazgo proactivo impulsado por el amor», en el que la iglesia desempeñe un papel esencial en el fomento de la resiliencia y la defensa de políticas que protejan a los vulnerables. Las iglesias y las organizaciones evangélicas colaboran con los gobiernos, las organizaciones benéficas y las comunidades locales para garantizar un futuro mejor, un futuro en el que eliminemos la contaminación, protejamos la naturaleza, salvaguardemos la salud y proporcionemos alimentos, agua, energía e infraestructuras de forma sostenible que beneficien tanto a las personas como al planeta.

imaginemos «un mundo de liderazgo proactivo impulsado por el amor» en el que las iglesias y las organizaciones evangélicas colaboran con los gobiernos, las organizaciones benéficas y las comunidades locales para garantizar un futuro mejor, un futuro en el que eliminemos la contaminación, protejamos la naturaleza, salvaguardemos la salud y proporcionemos alimentos, agua, energía e infraestructuras de forma sostenible que beneficien tanto a las personas como al planeta.

Puede sonar utópico, pero muchas de las herramientas que necesitamos ya están a nuestro alcance. The Nature Conservancy, donde trabajo como científica jefa, es líder en el desarrollo de sistemas alimentarios regenerativos, desde la agrosilvicultura hasta la pesca sostenible.22 Estos sistemas pueden gestionarse de forma que fortalezcan la salud del suelo y los ecosistemas, ayudándolos a ser más resilientes a los impactos climáticos. Los enfoques regenerativos también pueden mejorar la biodiversidad y reducir la necesidad de insumos químicos que contaminan el agua y el suelo.

Los barrios de bajos ingresos de algunas de las ciudades más grandes del mundo sufren a menudo altos niveles de contaminación y enfrentan riesgos elevados de calor extremo e inundaciones. La adición de vegetación puede reducir la contaminación atmosférica, disminuyendo los niveles de inflamación de las personas. Los árboles también mantienen los barrios más frescos durante las olas de calor, reducen el riesgo de inundaciones, mejoran la calidad de vida de los residentes, absorben carbono de la atmósfera y crean hábitats para la naturaleza.23

La energía solar es actualmente la forma de electricidad más barata que el ser humano ha conocido jamás.24 Esta es la principal razón por la que las energías renovables están creciendo tan rápidamente en todo el mundo,25 proporcionando electricidad asequible incluso en zonas sin infraestructuras tradicionales. Con energía limpia, las familias pueden iluminar sus hogares, gestionar pequeños negocios, refrigerar alimentos y medicinas e incluso acceder a Internet. Esto, a su vez, impulsa el desarrollo económico local,26 apoyando servicios que van desde la educación de mujeres y niñas (lo que a su vez disminuye de forma apreciable la mortalidad infantil)27 hasta ayudar a los agricultores a cultivar más alimentos incluso en condiciones cada vez más impredecibles.28

El cuidado de la creación está intrínsecamente ligado al bienestar de las personas, especialmente de aquellas que dependen de la tierra para obtener alimentos y agua, y que son las más afectadas por los impactos climáticos. Proteger el medio ambiente y promover soluciones sostenibles no solo salvaguarda la creación, sino que además mejora la salud y el bienestar humanos. Al liderar con amor, la iglesia mundial tiene el poder de catalizar acciones que beneficien directamente a las personas hoy y garanticen un futuro mejor mañana.

¿Cómo puede responder la iglesia?

La mayoría de la gente del mundo ni siquiera está hablando de este tema. ¿Qué mejor lugar para iniciar la conversación que un lugar en el que nuestra fe dé forma al diálogo? Esa es la forma más sencilla de que la acción por el clima comience en una congregación local. A través de grupos de estudio, conversaciones, sermones y demás, podemos reflexionar sobre el amor de Dios que se ha derramado en nuestros corazones y los dones que nos ha dado para servir a los demás.

En palabras de San Francisco de Asís, también podemos «predicar con nuestras acciones» y, en ese sentido, las iglesias pueden servir de modelo de comportamiento positivo para el clima y la naturaleza. Las auditorías energéticas ahorran dinero y emisiones de carbono. Los tejados de las iglesias pueden ser lugares ideales para proyectos solares comunitarios. Los terrenos pueden utilizarse para huertos que favorezcan a los polinizadores, huertos comunitarios o incluso pequeños bosques.29 Las iglesias también pueden crear proyectos de resiliencia climática para que la comunidad local esté preparada cuando se produzca un desastre.30

 los líderes de iglesia pueden abogar por políticas climáticas locales, nacionales y mundiales que prioricen a los pobres y vulnerables de todo el mundo y animar a otros líderes a hacer lo mismo. Al liderar la acción por el clima, la iglesia puede mostrar al mundo con hechos, no solo con palabras, cómo creemos verdaderamente que debemos ser reconocidos por nuestro amor a los demás (Juan 13:35).

Las iglesias pueden asociarse con organizaciones que trabajan por la justicia climática y la mitigación de la pobreza: Tearfund, World Vision, A Rocha, Plant with Purpose, Operation Noah, Compassion International y muchas otras. Las catástrofes ya están afectando a la logística y la eficacia de la labor de la iglesia en todo el mundo. Las inundaciones, las sequías y los conflictos por los recursos hacen más difícil llegar a determinadas zonas y desbordan los presupuestos de las organizaciones de ayuda y desarrollo, tanto en el país como en el extranjero. Garantizar que las organizaciones que realizan este trabajo dispongan de los recursos que necesitan es más importante que nunca. A su vez, estas asociaciones pueden aumentar la conciencia sobre condiciones que afectan a las personas y a la iglesia y que otros tal vez nunca habrían conocido de otra manera.

Por último, los líderes de iglesia pueden abogar por políticas climáticas locales, nacionales y mundiales que prioricen a los pobres y vulnerables de todo el mundo y animar a otros líderes a hacer lo mismo. Al liderar la acción por el clima, la iglesia puede mostrar al mundo con hechos, no solo con palabras, cómo creemos verdaderamente que debemos ser reconocidos por nuestro amor a los demás (Juan 13:35).

Reflexiones finales

La necesidad de actuar es urgente. Las consecuencias de desatender nuestra responsabilidad mutua y nuestro hogar común ya no son lejanas: están aquí ahora, son graves, y la iglesia no puede esperar más para actuar.

Como escribe Pablo en 2 Timoteo 1:7, «Dios no nos ha dado un espíritu de temor, sino de poder, de amor y de dominio propio». Dadas las crisis a que enfrentamos hoy, creo que este versículo nos llama a actuar con sabiduría, compartiendo el amor de Dios por cada persona y cada parte de su creación. Cuidar de la creación de Dios —tanto de las personas como de todos los seres vivos afectados por el cambio climático, la contaminación y la pérdida de naturaleza— es un fiel reflejo de nuestra fe y de la responsabilidad que Dios nos ha dado de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

Notas de fin

  1. John Coffey, ‘The Abolition of the Slave Trade: Christian Conscience and Political Action’, Cambridge Papers 15, no. 2 (June 2006).
  2. Tobias M. Masuku, ‘Prophetic Mission of Faith Communities During Apartheid South Africa, 1948-1994: An Agenda for a Prophetic Mission Praxis in the Democratic SA’, Missionalia: Southern African Journal of Mission Studies 42, no. 3 (November 1, 2014), https://hdl.handle.net/10520/EJC166018.
  3. Theodore Parker, Ten Sermons of Religion (Boston: Crosby, Nichols and Company, 1853), 84–85.
  4. Global Weirding with Katharine Hayhoe, ‘Just How Long Have We Known About Climate Change Anyways?’ YouTube video, 12 October 2016, https://www.youtube.com/watch?v=XpqBto89i38.
  5. Katharine Hayhoe and Friederike Otto, ‘What Cutting-Edge Science Can Tell Us About Extreme Weather’, New York Times, 17 August 2021, https://www.nytimes.com/2021/08/17/opinion/extreme-weather-climate-change.html.
  6. Katharine Hayhoe, ‘A Climate for All of Us,’ The Nature Conservancy, 11 November 2021, https://www.nature.org/en-us/magazine/magazine-articles/climate-justice-hayhoe/.
  7. Mary Robinson, Climate Justice: Hope, Resilience, and the Fight for a Sustainable Future (New York: Bloomsbury Publishing, 2019).
  8. Maurice Sadlier, ‘The Great Injustice Staring Us in the Face,’ World Vision, https://www.wvi.org/opinion/view/great-injustice-staring-us-face; Katharine Hayhoe, ‘I’m a Climate Scientist Who Believes in God. Hear Me Out’, New York Times, 31 October 2019, https://www.nytimes.com/2019/10/31/opinion/sunday/climate-change-evangelical-christian.html.
  9. Johan Rockström, ‘The Tipping Points of Climate Change — and Where We Stand,’ TED, video, July 2024, https://www.ted.com/talks/johan_rockstrom_the_tipping_points_of_climate_change_and_where_we_stand?subtitle=en.
  10. Global Weirding with Katharine Hayhoe, ‘This Is All Just a Part of a Natural Cycle, Right?’ YouTube video, 13 September 2017, https://www.youtube.com/watch?v=k5_zpjerQFo.
  11. Karn Vohra et al., ‘Global Mortality from Outdoor Fine Particle Pollution Generated by Fossil Fuel Combustion: Results from GEOS-Chem’, Environmental Research, 195 (April 2021): 110754, https://doi.org/10.1016/j.envres.2021.110754.
  12. Katharine Hayhoe, ‘One Planet, Two Crises: Tackling Climate Change and Biodiversity in the Fight for Our Future’, Scientific American, 22 May 2023, https://www.scientificamerican.com/article/one-planet-two-crises-tackling-climate-change-and-biodiversity-in-the-fight-for-our-future/.
  13. World Weather Attribution, ‘Climate Change More Than Doubled the Likelihood of Extreme Fire Weather Conditions in Eastern Canada’, 22 August 2023, https://www.worldweatherattribution.org/climate-change-more-than-doubled-the-likelihood-of-extreme-fire-weather-conditions-in-eastern-canada/.
  14. Michelle Bell, ‘Canadian Wildfires Impacted Health of Residents Hundreds of Miles Away,’ Yale School of the Environment, https://environment.yale.edu/news-in-brief/canadian-wildfires-impacted-health-residents-hundreds-miles-away
  15. World Weather Attribution, ‘Climate Change Made the Deadly Heatwaves That Hit Millions of Highly Vulnerable People Across Asia More Frequent and Extreme’, 14 May 2024, https://www.worldweatherattribution.org/climate-change-made-the-deadly-heatwaves-that-hit-millions-of-highly-vulnerable-people-across-asia-more-frequent-and-extreme/
  16. World Weather Attribution, ‘Climate Change and High Exposure Increased Costs and Disruption to Lives and Livelihoods from Flooding Associated with Exceptionally Heavy Rainfall in Central Europe’, 25 September 2024, https://www.worldweatherattribution.org/climate-change-and-high-exposure-increased-costs-and-disruption-to-lives-and-livelihoods-from-flooding-associated-with-exceptionally-heavy-rainfall-in-central-europe/.
  17. Alejandra Borunda and Rachel Waldholz, ‘Climate Change Made Helene More Dangerous. It Also Makes Similar Storms More Likely’, NPR, 9 October 2024, https://www.npr.org/2024/10/09/nx-s1-5144216/climate-change-hurricane-helene.
  18. Hau Dinh and David Rising, ‘Vietnam Typhoon Death Toll Rises to 233 as More Bodies Found in Areas Hit by Landslides and Floods’, AP News, updated 13 September 2024, https://apnews.com/article/vietnam-flooding-typhoon-yagi-deaths-95c5de93c84e636c32f2a875c77db0fa.
  19. Nick Beake and Amy Walker, ‘Barcelona Hit by New Flood as Rescuers Search Valencia Basement Car Park’, BBC News, 4 November 2024, https://www.bbc.com/news/articles/c937lq3dn05o.
  20. World Weather Attribution, ‘Climate Change Key Driver of Catastrophic Impacts of Hurricane Helene That Devastated Both Coastal and Inland Communities’, 9 October 2024, https://www.worldweatherattribution.org/climate-change-key-driver-of-catastrophic-impacts-of-hurricane-helene-that-devastated-both-coastal-and-inland-communities/.
  21. Sherri Goodman, Threat Multiplier: Climate, Military Leadership, and the Fight for Global Security (Washington, DC: Island Press, 2024).
  22. The Nature Conservancy, ‘Regenerative Food Systems: A Win-Win Cycle’, accessed 5 November 2024, https://www.nature.org/en-us/what-we-do/our-insights/agriculture/
  23. The Nature Conservancy, ‘The Green Heart Louisville Project’, 21 August 2018, last updated 27 August 2024, https://www.nature.org/en-us/about-us/where-we-work/un1ited-states/kentucky/stories-in-kentucky/green-heart-project/.
  24. Simon Evans, ‘Solar Is Now ‘Cheapest Electricity in History’, Confirms IEA,’ Carbon Brief, 13 October 2020, https://www.carbonbrief.org/solar-is-now-cheapest-electricity-in-history-confirms-iea/.
  25. Molly Lempriere, ‘Wind and Solar Are ‘Fastest-Growing Electricity Sources in History,’ Carbon Brief, 8 May 2024, https://www.carbonbrief.org/wind-and-solar-are-fastest-growing-electricity-sources-in-history/.
  26. Jennifer Rosen, ‘How Renewable Energy Serves as a Catalyst to Broader Social Change,’ World Economic Forum, 10 May 2024, https://www.weforum.org/stories/2024/05/how-renewable-energy-serves-as-a-catalyst-to-broader-social-change/
  27. Michelle Kaffenberger, Lant Pritchett, and Justin Sandefur, ‘Estimating the Impact of Women’s Education on Fertility, Child Mortality, and Empowerment When Schooling Ain’t Learning,’ Harvard Kennedy School, 7 March 2018, https://www.hks.harvard.edu/publications/estimating-impact-womens-education-fertility-child-mortality-and-empowerment-when.
  28. Sara LaJeunesse, ‘New AI App Predicts Climate Change Stress for Farmers in Africa,’ Penn State University, 23 September 2019, last updated 7 October 2019, https://www.psu.edu/news/research/story/new-ai-app-predicts-climate-change-stress-farmers-africa.
  29. Katharine Hayhoe, ‘FAQs: How Can Churches Reduce Their Carbon Footprint?’ accessed 5 November 2024, https://www.katharinehayhoe.com/faqs/#church-footprint.
  30. Wheaton College, Humanitarian Disaster Institute, ‘Resources’, accessed 5 November 2024, https://www.wheaton.edu/academics/academic-centers/humanitarian-disaster-institute/resources/.

Biografía del autor

Katharine Hayhoe

Katharine Hayhoe es una científica atmosférica cuya investigación se centra en comprender lo que significa el cambio climático para las personas y los lugares donde vivimos. Es la científica jefa de The Nature Conservancy y profesora distinguida de la cátedra Horn y profesora titular de Políticas Públicas y Derecho Público en el Departamento de Ciencias Políticas de Texas Tech University. Se desempeña como asesora científica de una amplia gama de organizaciones, entre ellas Young Evangelicals for Climate Action y Faraday Institute for Science and Religion. Su libro más reciente es Saving Us: A Climate Scientist’s Case for Hope and Healing in a Divided World y publica un boletín semanal, Talking Climate.
Información de contacto: www.katharinehayhoe.com.

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