El 20 de marzo de 2023, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de las Naciones Unidas publicó un informe sobre el último estado del mundo creado.
El informe es aleccionador: un aumento continuado de las emisiones de efecto invernadero que contribuye a un peligroso aumento de las temperaturas en todo el mundo, un incremento de 15 veces en las muertes causadas por desastres naturales cada vez más intensos y frecuentes, y una inseguridad alimentaria e hídrica generalizada provocada por el clima. Y, en medio de estas terribles afirmaciones, se destaca un tema común: la absoluta preocupación del informe por los pobres y los más vulnerables, que son los que más sufren las devastadoras consecuencias del cambio climático.
Este último informe confirma lo peor, pero también da lugar a la esperanza si actuamos ahora.
Una realidad tan terrible puede dejar a muchos desanimados. Pero los líderes cristianos en la vanguardia del cuidado de la creación están respondiendo al informe con una esperanza urgente. “Este último informe confirma lo peor, pero también da lugar a la esperanza si actuamos ahora, actuamos juntos y actuamos rápido”, dice Dave Bookless, catalizador de Lausana para el Cuidado de la Creación desde 2018 y director de teología de A Rocha International, que coordina la mayor red mundial de organizaciones cristianas para el cuidado de la creación.
“Nuestra decisión de tomar acción o no afectará las vidas de millones de personas y el florecimiento de la creación de Dios.”
Cómo el cuidado de la creación se convirtió en un tema del evangelio
La iglesia evangélica no siempre ha apoyado lo que ahora se denomina «cuidado de la creación». Uno de los momentos clave de este movimiento ahora mundial fue el Tercer Congreso de Lausana para la Evangelización Mundial (Ciudad del Cabo, 2010), donde la iglesia evangélica mundial adoptó por primera vez el cuidado de la creación como un tema del evangelio.
En los años previos al congreso, Ed Brown dirigía una organización llamada Care of Creation (Cuidado de la Creación), cuyo objetivo era movilizar a la iglesia para cuidar del mundo creado por Dios. A menudo era una empresa solitaria, y Brown recuerda que alguien le dijo una vez: «¿Un ecologista cristiano? ¿Existe tal cosa?”.
el Tercer Congreso de Lausana para la Evangelización Mundial, donde la iglesia evangélica mundial adoptó por primera vez el cuidado de la creación como un tema del evangelio
“Alrededor de 2007-8, empecé a oír rumores de que se iba a celebrar este gran encuentro de Lausana», recuerda Brown. “Teníamos que asegurarnos de que el cuidado de la creación figurara de algún modo en el programa. Así que empecé a trabajar entre bastidores con líderes interesados en el tema. Pero en ese entonces yo no formaba parte de Lausana, en realidad; era un infiltrado», dice con una risa.
A través de una conexión inesperada con Doug Birdsall, entonces el líder de Lausana, Brown recibió una invitación tardía para asistir a Ciudad del Cabo 2010, donde el cuidado de la creación tuvo un espacio como sesión multiplex.
“Lo importante para el movimiento en general no fue tanto lo que se dijo, sino simplemente el hecho de que estuviera allí», dice Brown. “Nunca antes se había dedicado tanto espacio al cuidado de la creación».
Lo más importante que salió de Ciudad del Cabo 2010 para el incipiente movimiento evangélico por el cuidado de la creación fue El compromiso de Ciudad del Cabo y su sección sobre el cuidado de la creación, que afirma:
Cuidamos de la tierra, sencillamente, porque pertenece a quien llamamos Señor.
[. . .] No podemos decir que amamos a Dios mientras abusamos de lo que pertenece a Cristo por derecho de creación, redención y herencia. [. . .] Porque proclamar el evangelio que dice “Jesús es Señor” es proclamar el evangelio que incluye a la tierra, dado que el señorío de Cristo es sobre toda la creación.
El cuidado de la creación es, por lo tanto, un tema del evangelio dentro del señorío de Cristo. Este amor por la creación de Dios exige que nos arrepintamos de nuestra parte en la destrucción, dilapidación y contaminación de los recursos de la tierra y nuestra complicidad en la idolatría tóxica del consumismo. En cambio, nos comprometemos a una urgente y profética responsabilidad ecológica.
Cuidamos de la tierra, sencillamente, porque pertenece a quien llamamos Señor.
La frase importante aquí, señala Brown, es “el cuidado de la creación es un tema del evangelio”.
“Esto nunca había sido dicho antes. Era la iglesia evangélica mundial diciéndose a sí misma: ‘Somos el pueblo del evangelio y creemos que el cuidado de la creación forma parte de ese evangelio’».
En noviembre de 2012, la Consulta de Jamaica sobre el Cuidado de la Creación y el Evangelio continuó la conversación que había comenzado en Ciudad del Cabo. Entre los principales organizadores se encontraban Ed Brown y Dave Bookless, así como Ken Gnanakan, Paul Cook y Las Newman, que fue el anfitrión de la reunión en Jamaica y proporcionó un enlace con los dirigentes principales de Lausana como director regional para el Caribe.
A lo largo de cinco días, entre cincuenta y sesenta personas colaboraron en la redacción del Llamado a la Acción de Jamaica, que insta a la iglesia mundial a cuidar radical y fielmente de la creación de Dios. El Llamado incluye líneas de acción como el compromiso con un estilo de vida sencillo, levantar líderes en la iglesia del Sur Global, misiones medioambientales entre grupos poblacionales no alcanzados, principios sostenibles en la producción de alimentos y la defensa profética.
“Era un mensaje importante para difundir por todo el mundo», afirma Brown. “Y estábamos decididos a que el Llamado a la Acción no muriera en el polvo. Lo mantendríamos vivo».
Un movimiento mundial y lo que ocurre después
En los diez años siguientes, la red de Lausana para el Cuidado de la Creación, dirigida por Brown, Bookless y comités organizadores regionales, convocó 12 conferencias en todas las regiones del mundo, reuniendo a defensores locales del cuidado de la creación, pastores y líderes de iglesias, y científicos.
El CCC y el Llamado a la acción de Jamaica proporcionaron una base teológica que ayudó a la gente a sentir que podíamos dar cabida al cuidado de la creación sin perder nuestra identidad
“El CCC y el Llamado a la acción de Jamaica proporcionaron una base teológica que ayudó a la gente a sentir que podíamos dar cabida al cuidado de la creación sin perder nuestra identidad evangélica», afirma Brown.
Con el tiempo, la red empezó a ver cómo el tema del cuidado de la creación se fue despolitizando de a poco. Fue alentador ver cómo la iglesia mundial se unía en cada uno de estos encuentros en un espíritu de cooperación y unidad. En 2015, la Alianza Evangélica Mundial (AEM) se unió a la red, por lo que el nombre oficial pasó a ser Red de Cuidado de la Creación de Lausana/AEM (LWCCN).
Ed Brown (izquierda) y Dave Bookless (derecha) con Tanya Van Horne, directora de colaboración de Lausana.
El mandato de 10 años de Ed Brown como catalizador de Lausana para el Cuidado de la Creación ha concluido, pero el movimiento que ayudó a poner en marcha crece con fuerza. Los cocatalizadores Dave Bookless (Reino Unido) y Jasmine Kwong (Filipinas), junto con colegas de la AEM, siguen coordinando un movimiento ahora mundial, con un boletín mensual que llega a 1.700 personas de más de 100 países.
“La gran barba blanca de Ed esconde un cerebro agudo, un sentido del humor encantador y un enorme corazón lleno de amor por Jesús, por los demás y por el mundo de Dios», dice Bookless. “Trabajar con Ed me ha enseñado mucho sobre cómo dar un paso por fe sabiendo que Dios proveerá, y que esta misión es, en última instancia de Dios, no nuestra».
Ahora que se ha completado la serie inicial de conferencias regionales, con la consulta final celebrada en la región de Oriente Próximo y África del Norte el año pasado, la LWCCN mira hacia el futuro.
La próxima etapa del movimiento cristiano mundial para el cuidado de la creación de Dios tendrá un aspecto diferente de lo que sucedió antes.
“La próxima etapa del movimiento cristiano mundial para el cuidado de la creación de Dios tendrá un aspecto diferente de lo que sucedió antes», afirma Bookless.
De las conferencias regionales, la LWCCN está pasando ahora a múltiples iniciativas locales y nacionales, a la colaboración con una red cada vez mayor de organizaciones cristianas y a una serie de seminarios web mundiales para informar y dotar de recursos a los cristianos. Y el movimiento actual es más diverso culturalmente, más joven y muy vibrante.
Una de las cosas más interesantes que están ocurriendo es la creación de políticas y estrategias de cuidado de la creación en varias organizaciones evangélicas de misión.
Jasmine Kwong, cocatalizadora para el Cuidado de la Creación y también misionera de OMF Internacional, está ayudando actualmente a facilitar una creciente red de agencias de misión conocida como Mission Agencies & Creation Care (Agencias de Misión y el Cuidado de la Creación, MACC). MACC cree que cuidar juntos de la creación es una expresión de compartir y vivir el evangelio para que la gente pueda conocer al Creador que puede transformar toda la vida.
“Actualmente tenemos representantes de más de 10 agencias de misión que se reúnen mensualmente para debatir y orar juntos», afirma Kwong.
Jasmine Kwong y Ed Brown
Hoy en día, en casi todos los países del mundo, hay líderes evangélicos que comprenden el llamado bíblico a cuidar del mundo de Dios y que tratan de trabajar estratégicamente para influir en las iglesias, las misiones y transformar sus naciones. Pero los retos a los que nos enfrentamos como humanidad son enormes.
“Dentro de Lausana, debemos asegurarnos de que el proceso de Lausana 4 y el Cuarto Congreso escuchen las voces de los jóvenes, las comunidades indígenas, los científicos y las víctimas de los desastres y cambios medioambientales», afirma Bookless.
El cuidado de la creación no es sólo el contexto para las misiones en el siglo XXI. Si realmente creemos que el cuidado de la creación es un tema del evangelio, entonces también es el contenido de nuestra misión.
“El cuidado de la creación no es sólo el contexto para las misiones en el siglo XXI. Si realmente creemos que el cuidado de la creación es un tema del evangelio, entonces también es el contenido de nuestra misión. Hacer discípulos de todas las naciones debe incluir que cada cristiano y cada organización vea el cuidado de la creación como parte integral de seguir a Jesucristo como Señor».
Bookless concluye señalando la declaración de A Rocha sobre la declaración del IPCC: “Nuestros esfuerzos son insuficientes, pero el amor y la fidelidad de Dios por todo lo que ha creado nos permiten mantener la esperanza de que la historia no ha terminado”.
Más información
- Video de 1 minuto y un resumen en Twitter del informe del IPCC por Katharine Hayhoe, Embajadora de Clima de la AEM
- Declaración en respuesta al informe del IPCC por A Rocha International
- Recursos de Lausana para el cuidado de la creación por la LWCCN
- El Llamado a la Acción de Jamaica