Manaw[1] nació en Birmania. A los cinco años de edad, fue llevada a China a vivir con su hermano mayor y trabajar como sirvienta en su hogar. Cuando cumplió los nueve años, su hermano la llevó a Tailandia para trabajar en una fábrica de pajillas. Después de recibir un adelanto del sueldo de ella, la dejó en la fábrica y nunca volvió. Durante los tres años que estuvo en la fábrica, trabajaba 17 horas diarias. No se le permitía ir a la escuela y nunca recibió un salario.
Un mal mundial
Los casos de trata de personas como éste ocurren en todos los rincones del mundo.[2] En 2017, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y Walk Free Foundation, en asociación con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dieron a conocer los resultados de una encuesta[3] que afirmaba que:
- Más de 40 millones de personas eran víctimas de la esclavitud moderna en 2016.
- Alrededor del 71 por ciento de ellas eran mujeres y niñas.
- Las mujeres y niñas constituían el 84 por ciento de las víctimas de matrimonios forzados y el 99 por ciento de las víctimas de trabajo forzado en la explotación sexual comercial.
- Una cuarta parte de las víctimas de la esclavitud moderna eran niños.
El trabajo forzado ocurre en sectores como el trabajo doméstico, la construcción, la fabricación, la agricultura, la pesca y la explotación sexual comercial. El Artículo 3, párrafo (a) del Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, a menudo llamado el “Protocolo de Palermo”, define el tráfico de personas como:
el reclutamiento, transporte, traslado, acogida o recepción de personas, bajo amenaza o por el uso de la fuerza u otra forma de coerción, secuestro, fraude, engaño, abuso de poder o una posición de vulnerabilidad, o recibir pago o beneficios para conseguir que una persona tenga bajo su control a otra persona, para el propósito de explotación. La explotación puede incluir, como mínimo, la explotación de la prostitución de otros u otra forma de explotación sexual, trabajo forzado o servicios, esclavitud, o prácticas similares a la esclavitud, servidumbre, o remoción de órganos.[4]
Prevención y atención ulterior
En el caso descrito anteriormente, Manaw, una niña menor de edad, era una sobreviviente del trabajo forzado. Este trabajo dañó su desarrollo en materia de salud, porque se le negó el derecho de asistir a la escuela y el entorno propicio de una familia segura. La amenazaron diciéndole que, si se escapaba, la policía la arrestaría por vivir y trabajar en Tailandia sin ciudadanía o documentación legal.
Sin embargo, cuando tenía doce años pudo armarse de valor para escapar. Pidió ayuda al dueño de una tienda local que la llevó a la comisaría. Manaw fue puesta en un refugio del gobierno durante unos meses mientras su caso era investigado, y fue derivada posteriormente a New Life Center Foundation (NLCF) para atención ulterior.
NLCF es una organización no gubernamental legalmente registrada en el norte de Tailandia que fue fundada en 1987 por misioneros que servían en Ministerios Internacionales de American Baptist Churches USA. NLCF sirve a niñas y jóvenes de tribus montañosas minoritarias que corren un riesgo elevado de abuso sexual, violencia doméstica y trata de personas, o que son sobrevivientes de estas situaciones.
La organización provee cuidado residencial integral, educación, capacitación en habilidades para la vida y servicios terapéuticos para un promedio de 70 estudiantes residentes. Además, más de 200 estudiantes no residentes reciben becas universitarias, mentoreo y gestión de casos. NLCF también realiza campañas de prevención en toda la región para educar a aldeanos tribales rurales sobre la trata de personas, el abuso sexual y la violencia doméstica. Los estudiantes realizan campañas en sus propios idiomas minoritarios usando representaciones teatrales, música y danza.
Apoyándose en más de 30 años de experiencia a nivel de las bases, NLCF ha obtenido una perspectiva única que informa la manera en que proveemos servicios de atención ulterior a sobrevivientes de la trata de personas y otras clases de traumas. Las recomendaciones que siguen se ofrecen con el humilde reconocimiento de que nuestra experiencia surge de un contexto específico. Alentamos al lector a considerar cómo estos principios pueden ser adaptados a otros contextos ministeriales.
La colaboración transcultural como un bien
Si usted sirve en un entorno transcultural, es importante trabajar de manera colaborativa con lugareños del grupo poblacional que está sirviendo. En New Life Center, uno de nuestros mayores recursos es la gran variedad multicultural de nuestros participantes:
- Tenemos miembros del personal, misioneros, miembros de la junta y donantes que provienen de muchas culturas.
- Ellos traen sugerencias creativas basadas en sus perspectivas culturales únicas que pueden suscitar soluciones innovadoras para problemas persistentes.
- Los extranjeros pueden tener permiso para implementar el cambio necesario que al personal local le podría resultar difícil iniciar.
- El personal nacional de tres diferentes grupos tribales étnicos aporta ideas basadas en un manantial profundo de sabiduría y experiencia contextuales.
El personal tribal trabaja de manera colaborativa con la Policía Real Tailandesa, escuelas y trabajadores sociales del gobierno para asesorar en temas de políticas, promover los derechos ciudadanos y proveer interpretación. Las tradiciones son valoradas y respetadas, y también estamos abiertos a experimentar con nuevas formas de hacer las cosas. Toda la comunicación se realiza en el idioma tailandés, que es el idioma principal del país en el cual vivimos. La conversación transcultural requiere una medida adicional de paciencia y gracia, pero también crea un entorno laboral dinámico y efectivo.
Receptividad y flexibilidad
La programación organizativa nunca debe volverse rígida y basada en políticas. Cada sobreviviente tiene necesidades, intereses y habilidades distintivas. Los beneficiarios deben tener un foro para expresar sus deseos y su frustración. Debe hacerse una adaptación razonable para responder a cada persona como individuo.
Por ejemplo, New Life Center recibió la derivación de una muchacha que formaba parte de una pandilla callejera y había sido forzada a vender su cuerpo como parte de su membresía en la pandilla. Ella tenía un locus de control bajo y expresaba su ira volviéndose violenta hacia otros residentes. Después de varias discusiones, el personal se enteró de que ella quería aprender a tocar la batería. Se le ofrecieron lecciones de batería como recompensa por controlar su conducta agresiva hacia los demás, y esto dio a la muchacha un canal apropiado para liberar sus emociones acumuladas.
El personal local también aporta habilidades y dones particulares, y debe ser estimulado a usarlos para beneficiar a la organización. Un flujo abierto de información debe ser alentado en todo el organigrama. A veces responder a una nueva oportunidad requiere que la administración practique la flexibilidad y el pensamiento creativo:
- No pierda una oportunidad para el crecimiento debido a una adhesión rígida a prácticas establecidas.
- De igual forma, si una actividad deja de cubrir las necesidades cambiantes de los beneficiarios, retírela.
La organización existe para los beneficiarios, no para el personal, que podría preferir seguir con la programación conocida.
Integración con la comunidad circundante
Una de las tareas clave para los sobrevivientes de traumas es desarrollar la resiliencia. Esto ocurre a través del desarrollo de recursos internos y externos:
- Los recursos internos incluyen educación, habilidades para la vida, aspiraciones, autorregulación, autoconfianza y un sentido de protagonismo.
- Los recursos externos incluyen la habilidad para usar el transporte público, tener amigos de apoyo, desarrollar relaciones con adultos responsables en su vecindario, y la capacidad para negociar expectativas culturales en su comunidad.
La competencia social se desarrolla dentro del contexto de sistemas comunitarios, así que aislar a los sobrevivientes en un esfuerzo por resguardarlos del peligro puede ser en realidad más dañino que permitirles experimentar los desafíos moderados de la vida cotidiana normal.
A fin de lograr la integración dentro de la comunidad, la programación organizativa debería hacer todos los esfuerzos por aprovechar los recursos comunitarios apropiados, como escuelas públicas, bibliotecas, programas de capacitación vocacional, iglesias y actividades deportivas. Los beneficiarios deben volverse competentes para vivir en la vida real una vez que dejen el programa. La mejor forma de lograrlo es apoyarlos y habilitarlos para hacerlo mientras están bajo el cuidado de su programa.
Además, las escuelas y programas de capacitación locales proveen diplomas acreditativos y certificaciones que los programas internos no dan. Esta certificación reconocida localmente hace que los beneficiarios tengan más oportunidades de empleo en el futuro.
Apoyarse en fuentes locales refleja también una buena administración de la financiación organizacional y beneficia a la comunidad, ya que los aranceles, los diezmos y las cuotas de membresía son canalizados a organizaciones locales. Ser un buen vecino nos permite construir puentes relacionales que, a su vez, hacen posible que hagamos brillar la luz de Jesucristo en nuestra comunidad.
La familia importa, aunque diste de ser ideal
Si es posible la reintegración en una familia, deberá hacerse todo lo posible para lograrlo:
- Si los sobrevivientes están dispuestos, deben ser estimulados a reconectarse con su familia y comunidad de origen tanto como sea posible de manera segura, ya sea a través de una reintegración completa o visitas familiares supervisadas.
- La familia también debe ser animada a visitar al beneficiario en momentos oportunos.
A menudo, los sobrevivientes de traumas vienen de trasfondos familiares dificultosos. Tal vez hayan sufrido abuso o abandono por familiares, y tienen sentimientos encontrados en relación a ellos. Sin embargo, es importante reconocer que la dinámica familiar puede mejorar con la capacitación y el apoyo de trabajadores sociales eficaces. Las personas necesitan sus familias, aun cuando sean complejas e imperfectas.
En New Life Center, a los residentes que tienen padres, madres y tutores se les anima a traer por lo menos un familiar a una orientación anual al inicio del año escolar. Durante esta orientación, el personal hace énfasis en que la familia sigue jugando un papel importante en la vida del beneficiario. Los niños y sus padres son estimulados a compartir sus expectativas y esperanzas mutuas. Durante la orientación, el trabajador social de mayor experiencia educa también a los familiares acerca de las leyes tailandesas relacionadas con los derechos del niño, el abuso y la violencia doméstica. Mejorar la salud familiar es un paso importante para proteger a las comunidades de los traficantes.
Programación impulsada por la visión, no por las prioridades de los donantes
Toda organización debe tener una visión, misión y valores claramente expresados que guíen su trabajo. Todo el personal debería entender la visión, la misión y los valores, y debería poder decirlos en sus propias palabras. Usted y el personal con el cual trabaja conocen las necesidades de sus beneficiarios mejor que los donantes. Por lo tanto, no sirve crear un programa simplemente porque un donante específico desea financiarlo. La organización debe buscar la financiación y educar a los donantes basándose en las necesidades expresadas por los beneficiarios.
Respuestas sugeridas
Trabajar con sobrevivientes de traumas no es fácil, pero tiene un propósito y es gratificante. Los cristianos evangélicos deberían estar a la vanguardia en la provisión de atención ulterior de calidad a los sobrevivientes de la trata de personas y traumas:
- Encuentre formas de involucrarse en este trabajo de restauración en su propia comunidad.
- Defienda a los sobrevivientes marginados.
- Opóngase a las fuerzas sistémicas injustas que protegen a los opresores y desempoderan a las víctimas.
- Dedique su tiempo, pericia, oración y recursos a apoyar a organizaciones que están involucradas en la prevención, la protección y el procesamiento.
La Biblia nos dice que Dios tiene una preocupación especial por las personas que sufren y por las marginadas. El profeta Zacarías escribió: “Así dice el Señor Todopoderoso: ‘Juzguen con verdadera justicia; muestren amor y compasión los unos por los otros. No opriman a las viudas ni a los huérfanos, ni a los extranjeros ni a los pobres’” (Zac 7:9-10a, NVI).
Al invertir en la sanidad y la restauración de los sobrevivientes, reflejamos la naturaleza compasiva de Dios y ofrecemos un atisbo de ese reino venidero en el cual todo será recompuesto.
Notas
- Un seudónimo usado para proteger la confidencialidad de la sobreviviente.
- Nota del editor: Ver el artículo de Abraham (Abey) George “El tráfico de seres humanos y la respuesta de la iglesia global” en el número de enero de 2014 del Análisis Mundial de Lausana https://lausanne.org/es/contenido/aml/2014-01-2/el-trafico-de-seres-humanos-y-la-respuesta-de-la-iglesia-global
- Global estimates of modern slavery: Forced labor and forced marriage (Geneva: International Labor Organization, Walk Free Foundation and International Organization for Migration, 2017) http://www.alliance87.org/global_estimates_of_modern_slavery-forced_labour_and_forced_marriage.pdf
- United Nations Convention Against Transnational Organized Crime and the Protocols Thereto. (New York: United Nations Office on Drugs and Crime, 2004) https://www.unodc.org/documents/treaties/UNTOC/Publications/TOC%20Convention/TOCebook-e.pdf.
Photo credits
Photos from New Life Center Foundation web site.