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En casi todas las denominaciones de África se puede reconocer la profunda influencia de la espiritualidad pentecostal. Ya sea que adoren en una iglesia anglicana o metodista, los cristianos africanos ofrecen al Señor exuberantes cantos de celebración, a menudo con una emoción desbordante. La guerra espiritual y el exorcismo son ministerios cotidianos para los pastores africanos. La respuesta estratégica de los cristianos africanos a la influencia de la globalización ha producido una síntesis creativa que combina la verdad universal del cristianismo con la espiritualidad carismática nacida de su tradición.

La respuesta estratégica de los cristianos africanos a la influencia de la globalización ha producido una síntesis creativa

Precursores del pentecostalismo en África

Varios grupos definidos fueron fundamentales para dar forma a la espiritualidad carismática entre los creyentes africanos.[1] Para comprender de manera exhaustiva el pentecostalismo africano, es importante situarlo dentro de la trayectoria y el contexto histórico de la apropiación de África y, en su continuidad actual, de la dimensión neumática del cristianismo, es decir, la conciencia de los cristianos africanos del mundo de los espíritus y el enfoque en el Espíritu Santo.

  • La primera precursora de las iglesias africanas infundidas por el Espíritu en el siglo XXI fue Kimpa Vita, una adivina tradicional del siglo XVIII del Reino del Kongo que afirmaba estar poseída por el espíritu de San Antonio. Se convirtió en un importante prototipo para los líderes religiosos que crearon una nueva síntesis al asignar los símbolos y mensajes cristianos a sus religiones tradicionales.
  • El segundo grupo de precursores, a finales del siglo XIX, fueron profetas africanos de las filas de la tradición cristiana que pedían una reforma moral y espiritual basada en el aspecto neumático del cristianismo. William Wadé Harris en África occidental, Isaiah Shembe en Sudáfrica y Simon Kimbangu en África central pertenecen a esta categoría.
  • A principios del siglo XX, entre las iglesias instituidas en África (AIC), surgió una ola de iglesias «orientadas al Espíritu» que se caracterizaron por centrarse en la sanación y la profecía. Algunas de ellas se desarrollaron en denominaciones poco organizadas como Aladura en África occidental y Zionist en África meridional. Haciendo hincapié en la sanación divina y el sobrenaturalismo, infundieron significados cristianos a algunos rituales y símbolos tradicionales.
  • El último grupo de precursores fueron movimientos de renovación espiritual dentro de las denominaciones principales, como el avivamiento de Balokole que tuvo lugar a principios del decenio de 1930 en la Iglesia Anglicana de Uganda. Llamando la atención sobre la laxitud espiritual y el fracaso moral de la iglesia, estos movimientos se esforzaron por revitalizar a los cristianos nominales haciendo hincapié en la labor transformadora del Espíritu Santo para lograr una vida espiritual más profunda.

El notable surgimiento de iglesias pentecostales en África en los últimos decenios debe entenderse como el esfuerzo acumulado de los movimientos de renovación que tuvieron lugar en África durante el siglo anterior. El papel fundamental de los africanos en estos movimientos dio forma y profundizó la espiritualidad carismática en las diversas denominaciones de las iglesias cristianas de África.

Tendencias actuales del pentecostalismo africano

1. Adaptación a las diversas culturas y tradiciones

El cristianismo pentecostal ha demostrado una capacidad única para adaptarse a diversas tradiciones culturales y religiosas.[2] En lugar de rechazar la creencia tradicional de una cultura en la existencia o el poder de los espíritus, los pentecostales demonizan a esos espíritus como totalmente malignos. Detrás de este complejo proceso hay un profundo dualismo: la cosmovisión pentecostal divide el mundo en bueno y malo, los que siguen a Dios y los que siguen al diablo. Al presentar al Espíritu Santo como un espíritu bueno y más poderoso, el dualismo pentecostal permite a sus seguidores mantener su cosmología espiritual autóctona e incluso su involucramiento ritual con los espíritus tradicionales a través de la guerra espiritual y el exorcismo cristianos.

2. Promoción de la modernidad

Desde el principio, el pentecostalismo ha ido de la mano de la modernidad en contextos rápidamente cambiantes. El pentecostalismo puede ofrecer diversas formas de empoderamiento social y espiritual a los marginados para que puedan avanzar hacia una vida mejor. Los pentecostales en los entornos urbanos de África adoptan características modernas como el individualismo, el capitalismo y la igualdad de género. Creen que cada persona, no una familia o tribu, es responsable de su salvación (individualismo); oran a Dios para que les ayude a encontrar trabajo en un nuevo mercado laboral capitalista (capitalismo); aprenden que deben tratar a sus cónyuges con más amabilidad, y evitan el adulterio (igualdad de género). Los pentecostales africanos han sido proactivos en forjar su propia modernidad a través de lo que aprenden de la moderna comunidad de fe mundial.

3. Atractivo para laicos y mujeres

Muchos cristianos laicos africanos, especialmente mujeres y personas sin educación, que antes estaban poco representados en el liderazgo de la iglesia, encuentran extremadamente atractivo el ethos igualitario del pentecostalismo. La teología pentecostal sostiene que la autoridad religiosa reside en una persona con dones espirituales, no en una burocracia religiosa; se le da un valor relativamente bajo a la educación teológica o a la ordenación oficial. Esta creencia fundamental abre un gran número de oportunidades para que los laicos y las mujeres sirvan como predicadores, evangelistas y sanadores en la iglesia. Por ejemplo, para movilizar a su congregación para diversos ministerios de la iglesia, una megaiglesia pentecostal de Uganda introdujo recientemente un nuevo lema: “cada miembro es un ministro”.

4. Innovación litúrgica

Los pentecostales son conocidos por su amplio uso de los medios de comunicación y la cultura popular. Las cruzadas al aire libre con evangelistas de renombre son una típica forma de llegar a no creyentes. Los instrumentos musicales electrónicos son tan importantes para el ministerio de adoración de los pentecostales africanos que incluso las congregaciones que no pueden permitirse mantener el edificio de su iglesia en buen estado consideran esencial disponer de una banda completa y un sistema de sonido de calidad. Los jóvenes están ansiosos por aprender canciones contemporáneas de la Iglesia Hillsong en Australia. Muchas iglesias pentecostales de África tienen su propio canal de YouTube (e incluso un estudio de transmisión) para transmitir música en vivo en lugares públicos. Los elementos espontáneos, experienciales y exuberantes del culto pentecostal ofrecen alternativas litúrgicas compatibles con la religiosidad africana.

Temas contemporáneos importantes en los movimientos pentecostales en África

1. El evangelio de la prosperidad

Las iglesias pentecostales han sido a menudo criticadas por su énfasis en las bendiciones materiales de salud y riqueza. El Compromiso de Ciudad del Cabo plantea importantes preocupaciones, señalando que “las enseñanzas de muchos que promueven vigorosamente el evangelio de la prosperidad distorsionan seriamente la Biblia” (CCC II-E-5).[3] Históricamente, muchos falsos profetas, no solo en África sino en todo el mundo, han prometido bendiciones materiales a cambio de generosas donaciones.[4]

Sin embargo, es importante señalar que el concepto africano de prosperidad difiere significativamente de la interpretación de los estadounidenses. Para estos, prosperidad significa tener un nuevo vehículo o una casa más grande. Para los africanos, en cambio, prosperidad significa tener una comida adecuada o acceso a la atención médica básica. Como podemos ver por lo que Jesús enseñó sobre la oración, es plenamente bíblico orar para que Dios satisfaga nuestras necesidades materiales diarias. Por lo tanto, debemos resistir la tendencia a generalizar sobre las creencias religiosas de los pentecostales africanos y asumir que se alinean con lo que conocemos del pentecostalismo estadounidense.

Actualmente, muchos pastores africanos están bien informados sobre los problemas teológicos relacionados con el evangelio de la prosperidad. Un destacado pastor pentecostal de Uganda, por ejemplo, afirma que nunca ha permitido que se predique el evangelio de la prosperidad en su iglesia. Un pastor metodista muy experimentado de Burundi explica que el evangelio de la prosperidad tiene un fuerte arraigo en iglesias independientes que carecen de estructura formal y educación teológica. Gracias a los esfuerzos combinados para contrarrestar el evangelio de la prosperidad, su prevalencia en las iglesias africanas ha disminuido en los últimos años, especialmente en las principales denominaciones.

2. Globalización y multiculturalismo

Los pentecostales africanos tienen clara conciencia del carácter mundial del cristianismo. Lo celebran como una contribución positiva a su viaje de fe. Los jóvenes africanos que viven en zonas urbanas están interesados en conectarse con el mundo exterior de todas las maneras posibles. Esa es probablemente la razón por la que en muchas partes de África están floreciendo congregaciones multiculturales mucho más que las iglesias monoculturales tradicionales.

Dos ejemplos notables de iglesias multiculturales son Christian Life Ministries (la iglesia de más rápido crecimiento en Burundi) y Christian Life Assembly (la iglesia de más rápido crecimiento en Ruanda). Estas iglesias hermanas dirigidas por equipos pastorales multiculturales (de Burundi, Ruanda, Uganda, Kenia, Canadá y Reino Unido) han atraído a jóvenes profesionales y estudiantes de veinte países diferentes mediante servicios de adoración de estilo moderno y programas de discipulado culturalmente sensibles.

Este tipo de iglesia carismática multicultural es difícil de categorizar; técnicamente hablando, no pertenecen ni a las AIC ni a las iglesias pentecostales clásicas. Ilustran la complejidad del impacto de la globalización en las iglesias pentecostales africanas. Debemos tener cuidado de no asumir que el movimiento pentecostal mundial tiene un carácter monolítico. Cualquier definición de pentecostalismo debe ser de naturaleza pluralista.[5]

3. Comprensión integral del universo

La creencia de los africanos en el mundo invisible de los espíritus ha sido fundamental para el fenomenal crecimiento del pentecostalismo en África. Percibiendo el mundo como una constante interacción entre fuerzas físicas y espirituales, los pentecostales africanos enfatizan el papel fundamental del Espíritu Santo en sus vidas. Tienen una comprensión integral del universo en la que no se puede trazar una frontera clara entre lo visible y lo invisible.

Muchos africanos contemporáneos que están completamente integrados en el mundo moderno conservan su cosmología tradicional. Es habitual considerar a la enfermedad, el infortunio y el conflicto relacional como formas de ataque espiritual. Los africanos no se quedan perplejos cuando se encuentran con alguien poseído por un espíritu maligno. La oración por el exorcismo y la sanación forma parte del ministerio ordinario de la mayoría de las iglesias africanas; participan activamente en la guerra espiritual como una forma de servir a los miembros que se encuentran en una situación de perturbación espiritual.[6] Un clérigo anglicano de Burundi describe cómo es llamado frecuentemente, día y noche, para orar por endemoniados. Parece poco probable que esta comprensión integral cambie pronto.

En el caso de las iglesias africanas, la llamada “carismatización del cristianismo africano” debe ser reconocida y celebrada como el intento exitoso de África de establecer una espiritualidad distintiva

Conclusión

El pentecostalismo africano no debe (y probablemente no puede) entenderse en términos puramente teológicos. Su carácter experiencial y espontáneo hace que sea difícil encajar el pentecostalismo africano en la pulcra categoría enmarcada por teólogos occidentales de orientación filosófica. Como previó Timothy Tennent hace un decenio, ha llegado el momento de aplicar ampliamente la teología cristiana interdisciplinaria e intercultural a los movimientos de misión del mundo.[7] En el caso de las iglesias africanas, la llamada “carismatización del cristianismo africano” debe ser reconocida y celebrada como el intento exitoso de África de establecer una espiritualidad distintiva que apele a la comprensión africana del universo.

Notas

  1. Ogbu Kalu, African Pentecostalism: An Introduction (Oxford: Oxford University Press, 2008); J. Kwabena Asamoah-Gyadu, African Charismatics: Current Developments within Independent Indigenous Pentecostalism in Ghana (Leiden: Brill, 2005).
  2. For a sociological analysis of Pentecostalism, see Joel Robbins, ‘The Globalization of Pentecostal and Charismatic Christianity,’ Annual Review of Anthropology 33 (2004): 117–43; Joel Robbins, ‘On the Paradoxes of Global Pentecostalism and the Perils of Continuity Thinking,’ Religion 33 (2003): 221–31.
  3. https://lausanne.org/es/contenido/compromiso
  4. Ver el artículo de Moses Owojauye “El problema de los falsos profetas en África” en el número de noviembre 2019 del Análisis Mundial de Lausana https://lausanne.org/es/contenido/aml/2019-11-es/el-problema-de-los-falsos-profetas-en-africa
  5. Allan Anderson, An Introduction to Pentecostalism: Global Charismatic Christianity (Cambridge: Cambridge University Press, 2004).
  6. Ver el artículo de J. Kwabena Asamoah-Gyadu “La guerra spiritual en el contexto africano” en el número de enero 2020 del Análisis Mundial de Lausana https://lausanne.org/es/contenido/aml/2020-01-es/la-guerra-espiritual-en-el-contexto-africano
  7. Timothy C. Tennent, Theology in the Context of World Christianity: How the Global Church is Influencing the Way We Think about and Discuss Theology (Grand Rapids, MI: Zondervan, 2007).

Credito de fotos

Article photos by Adedotun Adegborioye on Unsplash

Originario de Corea del Sur, Daewon Moon es Decano Académico de International Leadership University en Burundi. Recibió su doctorado en Gordon-Conwell Theological Seminary y su doctorado en Cristianismo Mundial en Boston University. Ha publicado artículos en The International Bulletin of Mission Research, Studies in World Christianity y The World Christian Encyclopedia.